El proceso se resolverá antes del 30 de abril, con idea de desarrollar los espectáculos entre el 1 de junio y el 30 de septiembre
La Fundación Municipal de Cultura abre este lunes, 15 de marzo, el plazo para solicitar la cesión de uso del patio central del Baluarte de La Candelaria para la celebración de eventos culturales durante el próximo verano. El plazo permanecerá abierto durante un mes, resolviéndose el proceso antes del 30 de abril. Según ha explicado la concejala de Cultura y Fiestas, Lola Cazalilla, este calendario permitirá llegar al verano “con una programación cerrada con tiempo y una línea cultural marcada que se base en la valoración de las propuestas y el contenido de los eventos”.
Las bases especifican que los espectáculos, conciertos y eventos culturales acogidos a esta convocatoria se celebrarán entre el 1 de junio y el 30 de septiembre. Entre las novedades de este año, cabe destacar que el servicio de hostelería y restauración durante los eventos será licitado por la Fundación Municipal de Cultura y no será, por tanto, competencia de las entidades organizadoras.
En este sentido, Cazalilla ha señalado que este cambio en la gestión “abre una oportunidad de actividad económica a profesionales del sector de la hostelería, además de ir en la línea de regularizar el servicio desde el control más absoluta de las medidas sanitarias. Al mismo tiempo, según ha apuntado, esta novedad permitirá “elevar el nivel de la oferta gastronómica en consonancia con el nivel del espacio del que se dispone”, lo que contribuirá, paralelamente, a “mejorar la imagen general del Baluarte de La Candelaria también desde este servicio”.
La Fundación Municipal de Cultura se compromete, de forma excepcional con motivo de la pandemia, a la limpieza y desinfección antes y después de cada uno de los eventos, así como a reforzar el servicio de guardia de seguridad para la puerta de emergencia. La cesión de uso será gratuita. Cultura se obliga, además, a que las instalaciones estén en buen uso antes del inicio de la actividad programada, a cuyos efectos contará con todos los servicios generales de agua, luz, electricidad y limpieza ordinaria del recinto.
Asimismo, asume la puesta a disposición de vallas de acotamiento, el suministro, montaje y desmontaje de sillas en caso necesario, así como a la instalación de un escenario fijo con unas medidas aproximadas de 12,6 metros de ancho por 6,5 de fondo.
Por su parte, la entidad que obtenga la cesión de uso deberá contar con una póliza de responsabilidad civil vigente en materia de espectáculos públicos que cubra las posibles contingencias derivadas de la actividad a desarrollar, tendrá que indicar con antelación suficiente si el control de las puertas de acceso se hará con personal de la propia entidad organizadora y, en caso de que se emplee una empresa de servicios para ello, deberá aportar el correspondiente contrato. También deberá contratar los servicios de un técnico electricista homologado para el montaje y desarrollo de la actividad.
Se suma a todo ello el cumplimiento de las medidas necesarias para evitar la propagación del Covid-19. Así, todas las personas que accedan al Baluarte de La Candelaria deberán llevar puesta en todo momento mascarilla y observar la obligación de mantener la distancia social mínima de 1,5 metros. El aforo máximo del evento estará condicionado a las medidas vigentes en cada momento. Junto a ello, se establece una serie de obligaciones respecto al control del público asistente, del respeto del horario de finalización de la actividad a las 2:00 horas y del control de los niveles de ruid