Como miembro del Comité de Honor del Bicentenario, Juan Manuel Moreno Bonilla realizó, de la mano del presidente de Barbadillo, un recorrido por los distintos cascos bodegueros del barrio alto de Sanlúcar de Barrameda.
Manuel Barbadillo Eyzaguirre, presidente de Bodegas Barbadillo, el director general de la bodega sanluqueña, miembros del consejo y del comité de dirección recibieron en sus bodegas de Sanlúcar de Barrameda al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, con motivo del bicentenario de la bodega de la que es, además, miembro del comité de honor.
Tras un año de conmemoraciones, dentro de las posibilidades que el COVID ha permitido, la presencia del presidente de la Junta de Andalucía supone uno de los actos principales de la conmemoración de los 200 años de una bodega pionera desde sus inicios cuando lanzó la primera manzanilla embotellada del mundo bajo la marca Pastora.
Manuel Barbadillo dirigió la visita al presidente de la Junta de Andalucía que ha estado acompañado por la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo. Ambos han tenido la oportunidad de conocer de primera mano las distintas estancias de la bodega: Casa de La Cilla, la “Sacristía” con las botas del “NO de los niños”, la bodega fundacional de El Toro y la bodega la Catedral de La Manzanilla.
Degustación de Manzanilla
Durante el recorrido, el presidente pudo comprobar el efecto que el velo de flor, el microclima y el tiempo ejercen sobre la manzanilla, probando manzanillas de diferentes edades.
Sanlúcar de Barrameda es el único lugar del mundo donde puede elaborarse la manzanilla, una singularidad que ha ayudado a que se reconozca a esta ciudad con el título de Capital Española de la Gastronomía 2022. Bodegas Barbadillo, con sus 200 años de trayectoria, es una parada obligatoria para conocer su influencia en la historia y gastronomía de Sanlúcar y de nuestro país.
Firma de botas
Finalmente, el presidente de la Junta tuvo la oportunidad de firmar una bota en el espacio de Honor del Bicentenario como muestra excepcional de permanencia en el tiempo celebrando sus dos siglos de historia.