Ambas organizaciones han presentado hoy el proyecto, financiado por la fundación MAVA y con el apoyo de BirdLife Internacional, que restaurará y revitalizará la salina de Balbanera, un enclave emblemático del municipio de Puerto Real, estratégicamente ubicado en el interior del Parque Natural de la Bahía de Cádiz y dentro de la Red Natura 2000.
SEO/BirdLife y Salarte han presentado hoy un nuevo proyecto de restauración ambiental, financiado por la Fundación MAVA y con el apoyo de BirdLife Internacional, en la salina de Balbanera, situada en Puerto Real, en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz.
Actualmente, solo existen nueve salinas en activo en la Bahía y más de 3.000 hectáreas de estos sistemas de extracción de sal marina de manera tradicional se encuentran abandonadas. Por este motivo, el proyecto de restauración de esta salina es especialmente importante, ya que pretende ser un nuevo ejemplo de recuperación de este tipo de humedales que permite compatibilizar el desarrollo económico y social con la conservación de la biodiversidad, uno de los principios que rigen a los espacios de la Red Natura 2000.
Ramón Martí, director de Desarrollo Institucional de SEO/BirdLife, ha explicado así la importancia de este proyecto: “Vamos a restaurar, revitalizar y conservar una de las salinas más emblemáticas de la bahía de Cádiz: Balbanera. Esta restauración creará y mantendrá un espacio vivo y dinámico, basado en la sostenibilidad ambiental y socioeconómica. Con este nuevo proyecto se demostrarán, una vez más, los múltiples beneficios que brindan los humedales costeros y su importante papel en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad”.
Por su parte, Juan Martín, presidente de Salarte, ha incidido en que el proyecto servirá “para demostrar la importancia social, económica, ambiental y cultural de estos ecosistemas húmedos de incalculable valor que son la marisma salinera y las marismas artesanales del Parque Natural Bahía de Cádiz. Espacios naturales que permiten la vida de todos los ciudadanos en la Bahía y generan un producto de altísimo valor añadido, un paisaje único y una cultura y una identidad ancestral”.
Este proyecto complementa otro más amplio en toda la bahía de Cádiz, donde se están analizando los servicios de los ecosistemas que ofrecen estos espacios y este en particular, y qué soluciones basadas en la naturaleza se pueden poner en marcha para reducir amenazas y potenciar esos servicios, como el secuestro de carbono, y la amortiguación de fenómenos como la erosión costera o las inundaciones, además del valor para la biodiversidad y la producción de alimentos. El objetivo, en definitiva, es mejorar la gestión de estos espacios históricamente humanizados, para mantener su viabilidad socioeconómica y su riqueza natural en el marco de un proyecto financiado por la Fundación MAVA.
La presentación de este proyecto ha contado con la presencia de Juan Martín, presidente de Salarte, Luis Costa, director del Programa Mediterráneo de la Fundación MAVA, Rafael Martín, director del Parque Natural Bahía de Cádiz y Ramón Martí, director de Desarrollo Institucional de SEO/BirdLife.
Acciones prioritarias
Los muros que protegían la salina Balbanera de la acción del viento y las olas (la conocida como «vuelta de afuera») están ahora destruidos; varias de las compuertas que controlaban el flujo de agua están rotas y el resultado es que las comunidades de aves acuáticas son ahora muy pobres y no pueden reproducirse. La restauración que hoy se pone en marcha consiste en reparar la infraestructura natural de la salina y la creación de espacios de nidificación para especies como el chorlitejo patinegro, el charrancito común, la avoceta común y el flamenco común, entre otras, lo que permitirá la recuperación de la biodiversidad, además de su capacidad productiva original.
Valor económico y ecológico
Por otro lado, al optimizar y diversificar la productividad y mejorar la gestión del humedal, se busca crear nuevas oportunidades de empleo para la familia que ha cuidado este espacio en las últimas décadas. La creación de nuevos servicios como el turismo ornitológico, la gastronomía orgánica, el ecoturismo y los eventos de educación ambiental generan oportunidades de empleo a escala local a partir de la mejora de la biodiversidad, la gestión y promoción del patrimonio natural y cultural.
No en vano, las salinas forman parte de la esencia misma de la bahía de Cádiz. Han sido su motor económico durante siglos y, además, su gestión tradicional, manteniendo niveles de agua predecibles a lo largo del año, ha permitido que la Bahía sea un lugar emblemático para el descanso de las aves en la ruta migratoria del Atlántico oriental.
Sin embargo, este sistema de gestión, que apenas ha variado desde sus orígenes en la época romana, ya se ha perdido casi por completo. En Cádiz solo existen nueve salinas en activo, y más de 3.000 hectáreas de estos sistemas se encuentran abandonadas en el Parque Natural Bahía de Cádiz.
Es por eso que este esfuerzo conjunto entre SEO/BirdLife y Salarte para transformar algunos de estos espacios degradados en entornos dinámicos, tendrá un beneficio social y ambiental y evitará su desaparición.