El leve descenso del paro supone un cierto alivio pero aún es necesario poner en marcha planes y políticas que hagan cambiar y modernizar el tejido productivo de la provincia de Cádiz
El presidente de CSIF Cádiz, Enrique Estévez, considera que la leve bajada del número de personas paradas en la provincia (en casi 800 personas) puede suponer un cierto alivio para la economía. Aunque todavía es pronto para hacer un análisis en profundidad, el responsable sindical espera que la reforma laboral recientemente aprobada suponga un estímulo para la creación de empleo estable y de calidad, a tenor del considerable incremento registrado en las contrataciones indefinidas respecto a las temporales. CSIF siempre ha defendido que la temporalidad, ya sea en los servicios públicos como en el sector privado, es indicativo de precariedad y obstáculo para el consumo y dinamización de la economía.
Por ello, CSIF insiste en que todavía es urgente y necesario que las administraciones públicas, en consenso con los agentes sociales y económicos, pongan en marcha planes y políticas que favorezcan la implantación de nuevas empresas, que diversifiquen y modernicen el tejido productivo. Igualmente, desde CSIF se reclama estabilidad en el empleo público y el incremento de plazas en las distintas administraciones, ya no solo como revulsivo para el empleo sino, sobre todo, para garantizar la calidad de los servicios públicos, deteriorados desde hace años por las políticas de austeridad y recortes.
Por otra parte, el hecho de que en la provincia de Cádiz haya 93.125 mujeres inscritas en el paro, frente a 61.200 hombres, “arroja una desigualdad que los responsables políticos deben afrontar y estudiar para poder corregirlo cuanto antes”, apunta Estévez.
Para Estévez, la provincia de Cádiz “sigue dependiendo de las temporadas turísticas mientras se pierden oportunidades que revaloricen el enorme patrimonio que posee esta tierra, el talento de la juventud bien formada y que bien podría servir para cambiar el rumbo de la economía gaditana, lastrada históricamente por ser el vagón de cola del desempleo nacional”.