La provincia de Cádiz ha registrado hasta julio un total de 36.462 beneficiarios del bono social de Endesa, destinado a reducir entre un 40% y un 80% la factura de la luz sobre el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), una cifra que representa un 12% más desde el mes de enero.
Del total de hogares gaditanos beneficiados con el bono social hasta julio, 16.750 son familias vulnerables y cuentan con una rebaja del 65% en su factura de consumo eléctrico, mientras que 19.712 son vulnerables severas y se benefician de una reducción en factura del 80%, ha informado Endesa en un comunicado.
En cuanto a su tipología, en Cádiz el 72,3% son personas en situación de vulnerabilidad según criterio de renta, el 20,7% son familias numerosas, el 3,8% son pensionistas, el 1,5% son beneficiarios del ingreso mínimo vital y el 1,7% hogares con bajos ingresos particularmente afectados por la crisis energética.
Según estos últimos datos de Endesa, desde 2020 la provincia de Cádiz ha registrado un incremento del 47% en los beneficiarios de esta ayuda, pasando de 24.818 a cierre de 2020, a los 36.462 actuales.
Esta ayuda está destinada a pensionistas, familias numerosas, personas en situación de vulnerabilidad, beneficiarios del ingreso mínimo vital y a hogares con rentas bajas y los descuentos en la factura de la luz estarán vigentes, al menos, hasta el 31 de diciembre de 2023.
Endesa está llevando a cabo campañas informativas con entidades sociales que trabajan con estos colectivos e invita a todas las personas que crean que pueden beneficiarse del bono social a solicitarlo.
La compañía es quien recibe la documentación, para después remitirse al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, el cual comprueba el cumplimiento de los requisitos económicos. Finalmente, la energética es la encargada de comunicar al cliente la resolución del Ministerio.