El alcalde de La Línea de la Concepción (Cádiz), Juan Franco, ha considerado las restricciones de agua anunciadas por la Mancomunidad del Campo de Gibraltar de «tremendamente duras» aunque ha entendido que las medidas están «justificadas» debido a la situación de sequía extrema que padece la comarca.
Franco ha apelado a la responsabilidad para acatar las restricciones, que entrarán en vigor este miércoles 10 de enero con una bajada de la presión entre las 6,00 horas y las 23,00 horas y una «bajada drástica» entre las 23,00 horas y las 6,00 horas, donde, dependiendo de la ubicación del domicilio o de la empresa, «habrá zonas en las que haya una especie de hilillo de agua y en otras que el corte sea total por la ubicación», como informaba este martes la presidenta de la Mancomunidad, Susana Pérez.
En una nota, el Ayuntamiento de La Línea ha anunciado la publicación de un bando municipal en el que se establecen las normas de obligado cumplimiento para toda la población basadas en las establecidas por la entidad supramunicipal.
Así, se prohíbe el uso de agua potable para riego de jardines y zonas verdes, tanto públicas como privadas, la limpieza de calles, el uso de fuentes ornamentales, duchas y surtidores públicos y el llenado de piscinas privadas y lavado de vehículos fuera de los establecimientos autorizados. Además, el bando advierte de que emplear el agua para usos prohibidos «puede tener graves consecuencias jurídicas según la legislación en vigor».
Por parte municipal, las restricciones de agua afectarán a varios servicios como los de Limpieza y Parques y Jardines. No obstante, desde el Consistorio se ha señalado que se suman a las medidas contenidas por los acuerdos adoptados por la Mesa de Sequía del Campo de Gibraltar, por lo que actuará «en consecuencia para potenciar los mecanismos de prevención a su alcance».
Según el alcalde, el Ayuntamiento lleva «varios años» aplicando medidas para disminuir su consumo, «logrando reducirlo en un 27% en 2023 con respecto al año anterior». Entre otras, ha recordado los cortes de suministro de agua en las duchas de playas durante la temporada de baño del pasado año y la limitación «al mínimo» de la utilización de agua potable en usos públicos.
Cabe recordar que el director de Argisa, José Manuel Alcántara, apuntaba este lunes que «hay un nivel crítico que marcaba los 41,5 hectómetros de agua embalasada en el conjuntos de los embalses de Charco Redondo y Guadarranque» y «hoy se está por debajo de ese nivel» por lo que «se ha cumplido el peor escenario que se planteó dentro de la Mesa de Sequía de octubre» porque «no ha llovido prácticamente nada y sobre todo las aportaciones a los embalses han sido mínimas».
En este sentido, aseguró que estas medidas tienen como objetivo un ahorro del 20% del consumo y «esta primera batería de medidas y este primer escenario de restricciones lo que pretende es eso, ver cómo evoluciona de aquí a la primavera».