Urbanismo paraliza y precinta dos parcelaciones ilegales en el diseminado de Chiclana
La Delegación Municipal de Urbanismo detiene la construcción ilegal de viviendas y cerramientos en Camino Isla de Sicilia y Hozanejos, con medidas que incluyen el corte de suministros y la apertura de expedientes para restablecer la legalidad.
La Delegación Municipal de Urbanismo de Chiclana, en coordinación con la Policía Local, ha procedido a la paralización y precinto de dos parcelaciones ilegales ubicadas en el diseminado, concretamente en el Camino Isla de Sicilia y en la zona de Hozanejos. Estas actuaciones, realizadas el 23 de mayo de 2025, buscan frenar la proliferación de construcciones sin licencia en suelo rústico y garantizar el cumplimiento de la normativa urbanística vigente.
En la parcela del Camino Isla de Sicilia, que supera los 2.000 metros cuadrados, se detectó una parcelación irregular con subdivisiones en varias subparcelas. En este terreno existen dos viviendas construidas de aproximadamente 100 metros cuadrados cada una, además de pequeñas construcciones anexas y una piscina.
Por su parte, en la zona de Hozanejos, la actuación se centró en una parcela con una vivienda de alrededor de 200 metros cuadrados, acompañada de una vivienda prefabricada de madera, diversas construcciones auxiliares y cerramientos. En este lugar se ordenó también el precinto del suministro eléctrico, el abastecimiento de agua, que provenía de pozos sin licencia, y el saneamiento mediante pozo negro o fosa séptica, medidas destinadas a evitar el uso y la ocupación de estas instalaciones.
Desde Urbanismo se recuerda que las edificaciones prefabricadas tienen la misma consideración legal que las construcciones de obra tradicional, por lo que su realización sin permiso constituye una infracción urbanística. En caso de que dichas edificaciones dispongan de suministro eléctrico, la delegación ordena a la compañía suministradora el cese inmediato del servicio.
Además de la paralización y precinto de las obras, se han iniciado los expedientes correspondientes de Restablecimiento de la Legalidad Urbanística. Dado que estas construcciones se sitúan en suelo rústico, la normativa implica no solo sanciones económicas sino también la demolición obligatoria de las edificaciones ilegales.
Estas medidas forman parte de la política municipal para controlar la expansión irregular en el diseminado, un problema que afecta a Chiclana y otras zonas rurales y que genera riesgos tanto para el ordenamiento territorial como para el medio ambiente.
