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Campo de Gibraltar

Catalina García destaca en Algeciras la descarbonización como oportunidad económica y energética para Andalucía

La consejera de Sostenibilidad resalta el papel del Campo de Gibraltar como motor de la transición energética y anuncia nuevas ayudas por 44,6 millones para mejorar la eficiencia industrial.

La Junta de Andalucía impulsa la descarbonización como una oportunidad estratégica para el desarrollo económico, industrial y energético de la comunidad, según destacó este martes la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García, durante su participación en el foro “Retos de la Descarbonización”, celebrado en el Auditorio Millán Picazo de Algeciras y organizado por Publicaciones 7.0.

El encuentro contó con la presencia de la secretaria general de Medio Ambiente y Cambio Climático, María López Sanchís; la delegada del Gobierno de la Junta en Cádiz, Mercedes Colombo; el presidente de la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras, Gerardo Landaluce (por vía telemática); el subdelegado de la Junta en el Campo de Gibraltar, Javier Ros; el delegado territorial de Sostenibilidad, Óscar Curtido; y el director del Parque Energético San Roque Moeve, Rosendo Rivero, en una sesión conducida por la periodista Ana Huguet (7TV Cádiz).

Durante su intervención, Catalina García afirmó que “la descarbonización se ha convertido en una verdadera necesidad para Andalucía”, una tierra que ya percibe los efectos del cambio climático y que “está llamada a ser referente en energías limpias gracias a su potencial natural y a la apuesta del Gobierno andaluz por un modelo productivo sostenible”.

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La consejera subrayó que el 69% de la energía generada en Andalucía procede ya de fuentes renovables, y que “en muy poco tiempo nuestra comunidad podrá considerarse energéticamente soberana”, al generar casi el 70% de la energía que consume. No obstante, advirtió que la transición “debe ir acompañada del refuerzo de la red eléctrica, la ampliación de la capacidad de evacuación y el desarrollo del almacenamiento energético”, retos que —según señaló— requieren colaboración con el Estado y la Unión Europea.

El Campo de Gibraltar, motor de la transición energética

García destacó el papel del Campo de Gibraltar como uno de los territorios con mayor potencial para liderar la transformación industrial de Andalucía. “Esta comarca reúne todos los ingredientes para convertirse en un espacio de oportunidad: industria, logística, puerto, talento y proyectos estratégicos como el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde”, señaló.

El proyecto del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, promovido por Moeve, contempla una inversión superior a los 3.000 millones de euros para la producción a gran escala de hidrógeno verde, generando empleo, innovación y energía limpia y competitiva.

La consejera añadió que “la transición energética será una palanca de empleo de calidad en el Campo de Gibraltar y en toda la provincia de Cádiz”, destacando la importancia de la formación profesional especializada para que los trabajadores andaluces sean “protagonistas del cambio hacia la nueva economía verde”.

Nuevas ayudas por 44,6 millones para eficiencia energética

García anunció que la Junta ha abierto una nueva convocatoria de ayudas por 44,65 millones de euros destinadas a autónomos, micropymes y pequeñas empresas de la cadena agroalimentaria, con el fin de fomentar la eficiencia energética y la reducción de emisiones. Estas subvenciones se suman a las lanzadas en octubre, alcanzando un total de 128 millones de euros en programas de apoyo a la descarbonización industrial.

Las medidas incluyen incentivos para la instalación de sistemas renovables (solar térmica, biomasa, biogás o autoconsumo fotovoltaico), así como la renovación de equipos y procesos productivos más eficientes.

“La descarbonización no es un coste, sino una inversión rentable”, afirmó la consejera. “Cada euro invertido en tecnologías limpias se transforma en ahorro, competitividad y empleo estable”.

Un proyecto compartido para una Andalucía sostenible

García insistió en que la transición energética “depende de la implicación de todos los sectores: administración, empresas, universidades y ciudadanía”. En este sentido, puso como ejemplo los programas autonómicos SACE (Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones) y el Catálogo Andaluz de Proyectos de Absorción de CO₂, que facilitan al sector privado medir, reducir y compensar sus emisiones mediante proyectos de reforestación y restauración ambiental.

“Nuestra meta es que Andalucía sea, en la próxima década, una región energéticamente independiente, climáticamente resiliente y económicamente más fuerte gracias a la sostenibilidad”, concluyó García.

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