Condenan a tres años y nueve meses de cárcel a un ‘petaquero’ por transportar 4.850 litros de gasolina en Chiclana

El Juzgado de lo Penal número 3 de Cádiz considera probado que el acusado puso en riesgo la seguridad vial al huir de la Guardia Civil y portar casi cinco mil litros de combustible sin autorización.

El Juzgado de lo Penal número 3 de Cádiz ha condenado a tres años y nueve meses de prisión a un hombre acusado de ejercer como ‘petaquero’, sorprendido mientras transportaba 4.850 litros de gasolina en garrafas de 25 litros dentro de una furgoneta que circulaba por Chiclana de la Frontera (Cádiz).
La sentencia lo declara autor de un delito de tenencia de sustancias inflamables, otro de conducción temeraria y un tercero de resistencia a agentes de la autoridad.

Según recoge el fallo judicial, los hechos ocurrieron el 19 de noviembre de 2024, cuando agentes de la Guardia Civil detectaron una furgoneta que circulaba a gran velocidad por la Avenida del Mueble, dentro del casco urbano chiclanero. Los agentes observaron que el vehículo se encontraba excesivamente hundido por el peso de la carga y desprendía un fuerte olor a gasolina, lo que levantó las sospechas.

Al intentar interceptarlo, los agentes hicieron uso de las señales luminosas y acústicas, pero el conductor hizo caso omiso y aceleró la marcha para huir, poniendo en peligro la circulación y realizando maniobras bruscas que estuvieron a punto de provocar un accidente.

Persecución y detención violenta

Finalmente, el acusado se introdujo en el estacionamiento de un comercio y abandonó el vehículo en marcha para huir a pie. Fue interceptado por la Guardia Civil tras una breve persecución, aunque ofreció una fuerte resistencia durante su detención, dando manotazos y braceando con violencia, hasta el punto de que cuatro agentes tuvieron que intervenir para reducirlo.

Una vez inspeccionada la furgoneta, los agentes encontraron 194 garrafas de 25 litros cada una, que contenían un total de 4.850 litros de gasolina, según confirmó el Servicio de Criminalística de la Guardia Civil. El acusado no estaba autorizado para el transporte de sustancias peligrosas y no cumplía ninguna de las medidas de seguridad exigidas por la normativa ADR que regula este tipo de mercancías.

La condena

El tribunal ha considerado probada la tenencia ilegal de sustancias inflamables, castigando al acusado con tres años de prisión por este delito. A ello se suman seis meses de cárcel por conducción temeraria y tres meses por resistencia a agentes de la autoridad, lo que eleva la condena total a tres años y nueve meses de prisión.

La sentencia subraya que la cantidad de combustible transportada y las condiciones de riesgo durante la conducción representaban “un grave peligro tanto para la seguridad del propio acusado como para el resto de usuarios de la vía pública”.

Con esta resolución, el Juzgado de lo Penal número 3 de Cádiz cierra un nuevo caso de tráfico ilegal de combustible, una práctica que en la provincia de Cádiz sigue siendo objeto de intensa vigilancia por parte de las fuerzas de seguridad.