España reduce un 10% el consumo energético de las viviendas y superará los objetivos de la Unión Europea

La reducción del consumo energético de las viviendas en España permitirá cumplir —y superar— los objetivos fijados por la UE para 2030 y 2035, según el Plan Nacional de Renovación de Edificios.

España ha logrado reducir un 10% el consumo energético de las viviendas entre 2020 y 2023, una evolución que, según el análisis del Plan Nacional de Renovación de Edificios (PNRE), permitirá al país superar ampliamente los objetivos establecidos por la Unión Europea para 2030 y 2035. Esta reducción del consumo energético de las viviendas coloca al país en una trayectoria favorable para cumplir la meta de neutralidad climática en 2050.

Los datos, difundidos por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, reflejan que en el periodo analizado se han llevado a cabo una media de 540.000 rehabilitaciones anuales, según cifras del Instituto Nacional de Estadística. De mantenerse el ritmo y las actuaciones previstas, se proyecta una reducción del consumo energético del 25% en 2030 y del 33% en 2035, muy por encima de los objetivos europeos —del 16% y del 20%, respectivamente— para esos mismos años.

La reducción del consumo energético de las viviendas en España forma parte de una estrategia más amplia vinculada al PNRE, documento estratégico alineado con el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). Con su puesta en marcha, el Gobierno pretende transformar por completo el parque edificatorio español, tanto público como privado, para alcanzar un modelo de edificios de cero emisiones en 2050. El proceso de audiencia e información pública del PNRE se inició este viernes.

El marco regulatorio responde a la actualización de la Directiva de Eficiencia Energética de los Edificios de la Unión Europea (EPBD), que exige a los Estados miembro presentar planes de acción para la descarbonización del parque construido. España impulsa así un plan a gran escala que incorpora Normas Mínimas de Eficiencia Energética (MEPS) y una hoja de ruta de rehabilitación masiva.

El PNRE estima que la reducción de consumo prevista entre 2020 y 2030 equivaldría a la rehabilitación integral de 1.567.986 viviendas, superando la previsión inicial contemplada en el PNIEC, cifrada en 1.377.000. Además, la reducción del consumo energético de las viviendas registrada entre 2020 y 2023 equivale a la rehabilitación integral de 615.000 inmuebles.

Para alcanzar los objetivos fijados, el plan propone el despliegue de siete políticas estratégicas que se desarrollarán a través de más de 200 actuaciones agrupadas en 57 medidas. Las principales líneas de acción previstas son la rehabilitación energética de edificios, la lucha contra la pobreza energética, la regeneración urbana sostenible, el impulso a las energías renovables, la mejora de la gobernanza y la financiación, la innovación y la circularidad del sector, y la sensibilización y formación de la ciudadanía.

La reducción del consumo energético de las viviendas conllevará importantes beneficios sociales y económicos. La implementación del PNRE permitirá acelerar la descarbonización del parque edificado, reducir la factura energética de los hogares y mejorar las condiciones de salud y confort. El Ministerio señala también que la ejecución del plan generará actividad económica, empleo cualificado y oportunidades para los sectores de la construcción, la rehabilitación y la energía.

El documento ha sido elaborado tras un amplio proceso participativo, enmarcado en la iniciativa “ARCE 2050. Arquitectura Cero Emisiones”. En él han intervenido más de 400 agentes a través de cuatro grupos de trabajo y cinco mesas de expertos, con el objetivo de diseñar un plan de renovación integral de los edificios que combine eficiencia energética, sostenibilidad urbana y cohesión social.

Con el inicio del trámite de audiencia pública, el Gobierno avanza en la implementación de una estrategia que marcará la transformación del parque edificatorio español en las próximas décadas, situando a España como uno de los países mejor posicionados para cumplir los compromisos climáticos europeos en materia de energía y edificación.