Los regantes andaluces señalan que se ha tomado una decisión razonable tras las lluvias registradas en las últimas semanas, que han aliviado la situación hidrológica
La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua), ha valorado positivamente la dotación final de 4.500 m3/ha de agua para la campaña de riego de este año, que ha sido aprobada en la reunión de la Comisión de Desembalse del Guadalquivir celebrada hoy; una dotación que Feragua considera razonable y que se adapta a la situación hidrológica actual tras las últimas lluvias registradas en el mes de abril, que han supuesto un alivio y han evitado el consumo de agua para el regadío en las primeras semanas de primavera.
Ante un escenario de desembalse propuesto de 1.000 hm3 en la anterior Comisión de Desembalse celebrada a primeros de marzo, después de las aportaciones de unos 150 hm3 en los meses de marzo y abril, desde “Feragua valoramos positivamente el desembalse propuesto de 1.100 Hm3 y la autorización de 4.500 m3/ha como dotación final para el regadío del sistema de regulación general, siguiendo el planteamiento que desde nuestra asociación le hicimos llegar a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y que entendemos que es lo más lógico dada la situación actual de nuestros embalses, pero que supone una significativa restricción del 25 %, que conlleva importantes esfuerzos de planificación de cultivos y de apuesta por cultivos de menos demanda, que también suponen menor generación de renta y empleo para nuestro territorio ”, señala el presidente de Feragua, José Manuel Cepeda.
La aprobación de estas dotaciones en el sistema de regulación general suponen unas restricciones de agua del 25%, que serán aplicables a las zonas regables con dotaciones concesionales de 6.000 m3/ha y para el sector arrocero, 4.500 m3/ha y 300 Hm3 respectivamente, siendo una restricción algo menor a las zonas regables con menor dotación concesional, hasta suponer un 10% el nivel de restricción para el cultivo del olivar.
Para los otros sistemas de explotación de la cuenca, que se encuentran en situación de normalidad (Colomera-Cubillas, Quentar-Canales, Bermejales), prealerta (Bembezar-Retortillo, Viar, Rumblar, Hoya de Guadix,…), las dotaciones a suministrar se han cerrado finalmente entre los 2.500 y 6.000 m3/ha, según el estado de cada sistema de explotación, tras consensuar los representantes de las zonas regables con los Ingenieros de las zonas y la Dirección Técnica, dichas dotaciones.
Feragua también ha valorado en positivo la aprobación de una reserva de 40 Hm3 para atender las demandas de la arboleda y hortícolas de invierno para los meses de octubre y noviembre, si las lluvias de otoño no la aportaran, planteamiento que también se trasladó desde los regantes andaluces a la CHG ante la complicada campaña de riego de este año por la falta de agua. “Siendo estas restricciones un gran varapalo para todos los regantes del sistema de regulación general, valoramos el esfuerzo de la CHG para que esta golpe sea menos duro que el inicialmente propuesto a primeros de marzo, para un sector que es esencial siempre, como el regadío y la agricultura, y que lo está demostrando de forma especial durante esta crisis sanitaria del coronavirus”, afirma José Manuel Cepeda.
Consciente de la situación de las reservas hídricas en nuestra comunidad, Feragua recomienda a sus asociados y regantes seguir guiándose por la prudencia, la eficiencia y el ahorro en el uso del agua para el riego, “optimizando los recursos para así hacer un correcta utilización de un bien tan preciado como es el agua, algo que hemos hecho siempre y que seguiremos haciendo para garantizar la agricultura y el suministro de alimentos a nuestra población”, señala el presidente de Feragua.
Por último, el presidente de Feragua, ha demandado a los responsables de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir que frente a este nivel de déficit estructural que padece la cuenca, que se pone de manifiesto por las periódicas restricciones (1992-1995, 2006-2008, 2019-2020), la administración hidráulica tiene que apostar por fomentar políticas de ahorro de agua como es la modernización del regadío, destacando la importancia del proyecto de modernización del sector arrocero de las marismas del Guadalquivir, cuyo proyecto está tramitando la propia CHG y que ahorraría recursos hídricos (entre 50 y 100 Hm3/año ) y energéticos (más de 20.000.000 Kwh) y garantizaría en mayor medida la sostenibilidad del sector arrocero.
José Manuel Cepeda también ha solicitado que de forma urgente se pongan en marcha las obras de regulación previstas en el Plan Hidrológico vigente, como son las presas de Cerrada de la Puerta en Jaén, San Calixto en Córdoba, Velillos en Granada y el recrecimiento de la presa del Agrio en Sevilla, que pueden aportar nuevos recursos y ayudar a que en el futuro superemos en mejor medida las consecuencias de próximas sequías, sobre todo considerando los previsibles efectos del cambio climático, que aumentaran los efectos de sequía e inundaciones, ya que las presas laminan las avenidas en las inundaciones –evitando daños materiales y humanos– y atesoran los recursos hídricos para las épocas de sequía, posibilitando superar en mejor medida los periodos de restricciones.