Cáritas recibirá 1,5 millones de euros para continuar con el programa extraordinario de ayuda en materia de necesidades básicas
La delegada de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación en Cádiz, Ana Fidalgo, ha visitado hoy el Centro de Participación Activa de San Fernando acompañada del obispo de Cádiz, Rafael ZornozaBoy, que ha incluido este acto en su ronda de visitas pastorales a recursos sociales del municipio. Durante el encuentro, en el que han sido recibidos por la directora, Esmeralda Modesto, y la Junta de Gobierno, Fidalgo ha agradecido al Obispado su solidaridad y colaboración en la atención a personas vulnerables de la provincia, una labor que se ha intensificado desde el inicio de la pandemia y con la crisis económica derivada del coronavirus. También han comentado la importancia de los CPA para luchar contra la soledad no deseada de las personas mayores y que la Consejería ha trazado un protocolo para su detección.
La delegada ha recordado que Cáritas recibirá un montante de 1,5 millones de euros para continuar con el programa extraordinario de ayuda en materia de necesidades básicas destinado a población en situación de vulnerabilidad y/o exclusión social por el Covid-19 para el acceso a productos y servicios relacionados con la vivienda, la salud, la educación, la reducción de la brecha digital y otras carencias de primer orden. Este programa también se inició en 2021 y ahora permitirá atender a más de 9.000 personas en la provincia de Cádiz.
En esta ocasión, esta medida cuenta con una subida importante de su presupuesto puesto que está destinado a combatir la pobreza energética por el incremento de la factura de la luz que ha marcado los últimos meses y que ha dejado a muchas familias en una situación crítica. Las ayudas también irán destinadas a gastos como el alquiler, material informático y escolar, servicios escolares (aula matinal, comedor, aula de mediodía, etcétera), gastos de transporte, material farmacéutico, óptica, ortopedia, odontología o servicios terapéuticos.
La delegada territorial ha trasladado la voluntad de su departamento “de seguir yendo de la mano de las entidades sociales para poder salir de la actual crisis económica y dar respuesta a las personas más vulnerables. Entendemos que la mejor fórmula es el trabajo colaborativo desde la cooperación y la lealtad con las entidades locales y, en este caso, del Tercer Sector”, ha añadido.
“Desde Cáritas, desde el Obispado, se atiende a personas sin hogar, a personas enfermas, a muchas familias necesitadas, y gestionan centros de día o residenciales, llevando a cabo una labor impagable labor social a lo largo de muchas décadas ya al servicio de las personas más vulnerables, y es de justicia reconocerlo”.
Asimismo, ha puesto en valor el papel de los voluntarios que colaboran con la entidad. “Ese caudal de solidaridad es una de las mejores señas de identidad del pueblo andaluz”, ha resaltado, por lo que ha animado a que haya una mayor participación aún “a fin de llegar a todos los rincones para las personas que más lo necesitan”.
“Esta nueva partida de ayudas impulsada desde la Consejería de Igualdad permitirá prorrogar los programas que se han puestos en marcha y que están funcionando, porque los recursos están llegando a todas las personas que más los necesitan”, ha valorado. Y ha destacado además que “es todo un ejemplo de cómo puede funcionar a la perfección la colaboración público-privada en un momento de emergencia social que supera completamente la gestión de todo lo establecido previamente a la pandemia”.
Por último, ha querido compartir con el Obispado la apuesta del Ejecutivo andaluz “por un cambio en el paradigma de las políticas sociales en la comunidad, que nos permitirá avanzar hacia un modelo de inclusión mediante fórmulas que se enfocan en la formación y la educación a través de itinerarios individualizados, a fin de ofrecer a las personas de mayor vulnerabilidad un proyecto de vida”.