El delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en la provincia, Juan Luis Belizón, y la coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer, Josefa Moreno, acompañados del delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Manuel Herrera, han presentado hoy la campaña #AcudeEscuchaAcompaña, una iniciativa de sensibilización en materia de violencia sexual dirigida a la población en general, con el fin de promover el apoyo a las víctimas y el rechazo a toda actitud machista que justifique a los agresores. La campaña da difusión de todos los servicios que se prestan en Andalucía para atender a las víctimas de la violencia sexual, una red de recursos a la que este año se ha sumado el Servicio de Atención Inmediata a Mujeres en caso de Agresiones Sexuales, un nuevo servicio de atención psicológica y jurídica urgente que se activará ante las llamadas por agresiones sexuales recibidas a través del Teléfono de Información a la Mujer (900 200 999).
El nuevo servicio, que es gratuito, anónimo y confidencial, funcionará de jueves a domingo y días festivos, con el fin de dar cobertura a las víctimas durante los días de mayor riesgo, dado que la mayor parte de las agresiones sexuales se producen en el marco de fiestas locales y salidas nocturnas. Según ha explicado Belizón, el servicio lleva como lema #DETULADO, “para recordar a las víctimas que estamos de su lado, para apoyarles, darles la mano y acompañarles desde el instante en el que piden ayuda”.
Esta atención telefónica especializada, que contempla el desplazamiento de personas expertas en caso necesario, está conectada con el Servicio de Información Jurídica, Asistencia Legal y Atención Psicológica a Mujeres Víctimas de Abusos y/o Agresiones Sexuales, al que se derivarán las víctimas que lo necesiten tras esa atención inmediata.
El servicio específico de atención jurídica y psicológica atendió el pasado año en la provincia 13 nuevos casos (la cifra es similar a la de 2016), a los que hay que añadir los 51 que ya se están atendiendo y a los que se hace seguimiento desde el inicio de este programa específico. En ese sentido, el delegado del Gobierno ha señalado que la de Cádiz “es la primera de Andalucía en número de sentencias condenatorias a través de este servicio, en concreto, un 90%”.
Como ejemplo del problema social que existe de violencia contra la mujer, Belizón ha querido resaltar que en el Servicio de Asistencia a las Víctimas en Andalucía (SAVA) dependiente de la Consejería de Justicia se atendió el año pasado a 924 personas en la provincia de Cádiz, y de ellas el 72% eran mujeres. La cifra es superior a la del año anterior (2016), cuando se atendió en este servicio a total de 858 personas, el 63% mujeres. Y precisamente los delitos por los que fueron atendidas estas víctimas durante el pasado año fueron mayoritariamente contra la integridad moral (24,5%) o contra la libertad sexual (18%).
La coordinadora provincial del IAM, por su parte, ha destacado que la campaña presentada recuerda que la violencia sexual se sigue explicando desde análisis sexistas y mitos que perpetúan la violencia estructural contra las mujeres y que conceden justificación a los agresores, por lo que hace una llamada a la concienciación y al apoyo a las víctimas.
Para ello, la campaña, que se desarrollará a lo largo de este año a través de redes sociales, landing page, cartelería, folletos, pegatinas, mupis en las paradas de autobuses, y servilletas de papel en el sector de la hostelería, ofrece información de la web del IAM y pone a disposición de la ciudadanía el Teléfono de Información a la Mujer (900 200 999). Asimismo, cuenta con un folleto informativo, en papel y online, que explica en qué consiste la violencia sexual, ofrece herramientas psicológicas de acción y prevención de la violencia sexual y da difusión de los recursos del IAM a los que acudir ante una agresión.
Ampliación programa adolescentes
Junto a ello, el IAM ha ampliado el programa de Atención Psicológica a Mujeres Menores de Edad Víctimas de Violencia de Género, con un servicio psicológico especializado en violencia sexual para atender de manera específica a las adolescentes que la hayan sufrido, ya que se ha detectado que algunas chicas atendidas en el programa por violencia de género han vivido en el marco de la pareja abusos y/o agresiones sexuales, pese a no ser conscientes de ello cuando acuden al inicio de la terapia.
De este modo, el equipo de profesionales del programa, que atendió el pasado año diez casos de adolescentes de entre 14 y 18 años víctimas de violencia de género en la provincia de Cádiz (prestándoles terapia psicológica gratuita y especializada), ha detectado en estos años que el sexo se utiliza como forma de violencia de género, ya que los chicos agresores someten a sus parejas a prácticas que no les agrada “como prueba de amor”, cayendo ellas en el llamado “falso consentimiento“. Junto a ello, se ha observado el fenómeno de la “pornovenganza”, que algunos agresores ejercen cuando ellas han dado el paso de romper con la relación.
Se trata de una violencia sexual invisibilizada, que inicialmente no reconocen las menores que la sufren por desconocimiento de sus derechos, por la normalización de la imposición de las relaciones sexuales presente en la cultura y la insuficiente formación sexual de las personas jóvenes para contrarrestar la pornografía patriarcal imperante.
Con la ampliación, el programa contará ahora con 8 psicólogas (una por provincia) especialistas en violencia sexual, que atenderán a las usuarias cuando se detecte abuso o agresión sexual. Según ha explicado Moreno, la terapeuta llevará a cabo una intervención psicológica individual, pudiendo luego configurar grupos de terapia en función de la idoneidad de las usuarias, además de ofrecer también orientación psicoeducativa a las familias.
Las agresiones y los abusos sexuales son delitos contemplados en el Código Penal que atentan contra la libertad e indemnidad sexuales, y que suponen un problema social por la magnitud de su alcance y por vulnerar los derechos humanos de las mujeres. Según la encuesta realizada por la Agencia de los Derechos Fundamentales de la UE, una de cada diez mujeres europeas ha sufrido alguna vez agresión sexual, y una de cada 20 ha sido violada alguna vez en su vida, en la mayoría de los casos dentro del entorno más cercano.