Abre la sesión el pasodoble con pellizco de la ‘Chirigota de la Viña’, con letra y música de José María Barranco Cabrera y dirección de Sergio Mora Campos. De la viña vienen, pero de pisar la uva. Eso sí, la pisan en mitad de la calle de La Palma porque los vendimiadores nacen donde les dala gana. Comienzan la presentación a oscuras para mantener la sorpresa el mayor tiempo posible.
Con el primer pasodoble llega la primera sorpresa. Parece que la letra va dedicada a la mezcla entre nervios y alegría que sienten el día de su debut en el teatro para finalmente revelar que se refieren a Pedro el de los Majaras, que canta a continuación con su comparsa. El segundo a su vecina, María Hierbabuena, a la que conocen desde que eran niños.
El primer cuplé, con final feliz, a su terapia con acupuntura para dejar de fumar. El segundo, subido de tono, a una turista americana de muy buen ver que va a ver la pisa de la uva.
Aunque el popurrí tiene gracia, en honor a la verdad se basa fundamentalmente en puntos escatológicos y sexuales. Además, casi la mitad es un diálogo entre José María Brranco y el componente del cuarteto de Joselito que el año pasado interpretaba la madrastra y que aparece disfrazado de racimo de uvas en mitad del popurrí.
Una chirigota con altibajos, en principio si pasan a cuartos de final, que no sería de extrañar, lo haría raspando el corte.