Agentes de la Guardia Civil han desmantelado en Chipiona (Cádiz) una macroplantación de marihuana, con más de 1.500 plantas, que se había instalado en un invernadero que el ahora detenido había alquilado para tal fin a una familia que estaba totalmente ajena al tipo de cultivo que se desarrollaba en su propiedad. El detenido es un empresario dedicado al negocio de la flor cortada.
Según ha explicado la Guardia Civil, los hechos ocurrieron en la tarde de este miércoles cuando los guardias civiles del Área de Investigación del Puesto principal de Chipiona intervinieron tras haber tenido conocimiento de que una persona que se dedicaba al negocio de la flor cortada habría cambiado su área de negocio a otro tipo de especies florales.
Tras numerosas gestiones policiales, los agentes detectaron un invernadero que hasta hace poco tiempo se encontraba en uso para labores agrícolas, donde se habían tomado numerosas medidas para impedir cualquier observación desde el exterior, destacando que se percibía un fuerte olor de este tipo de cultivo ilegal.
Los guardias civiles destacaron que, en esta ocasión, no se había realizado ningún tipo de instalación eléctrica, ya que el perfecto conocimiento de las características y funcionamiento de los invernaderos le hacía posible aprovechar la luz solar y las condiciones de humedad y temperaturas óptimas para este tipo de cultivo, lo que le permitía incrementar exponencialmente los beneficios del ilícito negocio.
Las vigilancias a que sometieron la finca dieron como resultado la constatación de que se estaba desarrollando este tipo de cultivo ilegal, por lo que los agentes procedieron a registrarla y encontraron en el interior más de 1.500 plantas de marihuana entre metro y medio y dos metros de altura en estado óptimo de floración y crecimiento, cuyo peso tras corte alcanzó los 1.180 kilos.
Así, ante las evidencias con las que contaban procedieron a la detención de la persona responsable como presunto autor de un delito de elaboración y cultivo de drogas.