El alcalde de Torre Alháquime (Cádiz), Pedro Barroso, ha destacado el «comportamiento ejemplar» de los vecinos para protegerse del covid-19 y ha destacado que «desde que empezó la pandemia solamente se han contagiado 37 personas», al tiempo que ha recordado que «durante los nueve primeros meses no hubo ningún contagio» en el municipio.
En declaraciones a Europa Press, Barroso ha detallado que «en un pueblo tan pequeño la incidencia sube muy rápido porque con cuatro personas ya se tiene una incidencia de más de 500», y ha indicado que «los datos que tiene la Junta es que en la última semana ha habido cuatro personas, que son nuevas, pero están bien y no tienen ningún problema, se han hecho pruebas sucesivas y lo que consta, a día de hoy, es que todas las PCR han salido negativas».
Aun así, el regidor torreño ha afirmado que «la tabla de la Junta indica que se superan los 1000 puntos, pero de las ocho personas que aparecen en la tabla, cinco están ya de alta», y ha lamentado que «las estadísticas van tarde».
En este sentido, Barroso ha repasado la trayectoria de la pandemia y ha explicado que «desde el principio se ha intentado, desde el Ayuntamiento, poner todos los medios a disposición de los vecinos para protegerlos». «Se han repartido mascarillas, se han limpiado y desinfectado las calles, locales, establecimientos, dependencias municipales y en el colegio se repartieron mascarillas».
Sobre la preparación para la pandemia, ha expresado que «un Ayuntamiento tan pequeño se prepara con sus propios medios, protegiendo muy bien a los ciudadanos, dándole toda la información que se tiene e intentando concienciar y convencer a los ciudadanos de cuál era el mejor trabajo que podía hacer cada uno en favor de la ciudadanía, que era tener responsabilidad y actuar de forma correcta en todo aquello que diariamente se hacía».
Así, se ha mostrado orgulloso de que «mujeres y hombres de Torre Alháquime tejieron sus mascarillas y las repartieron a todos los vecinos; y los agricultores, con sus propios medios y de forma altruista, estuvieron desinfectando toda la pandemia hasta estos últimos días todas las calles».
En el plano económico, Barroso ha argumentado que «todas las administraciones, excepto la Diputación, han ayudado a cuentagotas». «En un pueblo pequeño, de 815 habitantes acostumbrados a tener una forma de vida saludable, a permanecer mucho tiempo en la calle, a una relación personal muy estrecha, un virus así provoca mucho temor y mucho miedo, pero luego, a través de la concienciación que todos tienen el comportamiento, exceptuando algunas cuestiones, ha sido ejemplar», ha concluido.