La Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María y Pura Vida han presentado una nueva experiencia para atraer al municipio a los cruceristas que llegan al Puerto de Cádiz, combinando un recorrido en catamarán con visitas a bodegas y al patrimonio histórico de la ciudad. Con esta iniciativa se busca impulsar el turismo local y reforzar la conexión con la capital gaditana.
La concejala de Turismo y Promoción de la Ciudad de El Puerto de Santa María, Olga de Navas, el gerente de la empresa de catamaranes Pura Vida, Javier Ramírez Guillón, y Ninfa de Castellví, responsable de eventos y MICE, han presentado esta nueva iniciativa dirigida a los cruceristas que llegan al muelle gaditano, ha informado el Ayuntamiento en una nota.
Este proyecto ofrece «una experiencia inolvidable», al fusionar «la belleza natural de la ciudad con su rica tradición vinícola», según el Ayuntamiento. De esta manera, el programa invita a los cruceristas a embarcarse en el catamarán Pura Vida, una lujosa embarcación con capacidad para 150 pasajeros diseñada para brindar «el máximo confort».
Para Olga de Navas, traer a los cruceristas a su ciudad es «una gran oportunidad para que descubran el encanto de El Puerto, desde nuestras bodegas hasta nuestro patrimonio cultural», mostrándose convencida de que esta experiencia «dejará una huella imborrable en cada uno de los visitantes».
Esta iniciativa supone «un importante impulso» para el turismo de El Puerto de Santa María, consolidando su conexión con Cádiz y favoreciendo la llegada de nuevos visitantes que dinamizarán la economía local. Una colaboración entre el Ayuntamiento y Pura Vida que «refuerza el atractivo» de la localidad portuense como destino turístico «de primer nivel» y ofreciendo a los cruceristas «una experiencia única que combina cultura, historia y enología».
Adaptado también para personas con diversidad funcional, el catamarán ofrece a los pasajeros «vistas espectaculares» mientras navegan hacia El Puerto de Santa María. Durante la travesía, cuentan con un servicio de bar y actividades adicionales como catas de vinos a bordo.
Al llegar a El Puerto los cruceristas tienen la oportunidad de explorar las bodegas locales, reconocidas por la producción de vinos de Jerez. En ellas, habrá catas guiadas por sumilleres, que los llevarán a «un recorrido sensorial por los sabores y aromas característicos de la región».
Además, se ofrece una visita guiada por el casco histórico de la ciudad, conociendo monumentos importantes de El Puerto como el Castillo de San Marcos, la Plaza de Toros y el Monasterio de la Victoria, entre otros.