El portavoz en Cádiz de la organización ultracatólica Hazte Oír, Pedro Mejías, ha denunciado ante la Policía Nacional haber sido agredido por «radicales de Podemos mandados por Kichi» mientras preparaba junto a otros integrantes de la organización el manifiesto tenían previsto leer junto al monumento a las Cortes de Cádiz en la plaza de España.
En un video grabado en la puerta de Urgencias del Hospital Puerta del Mar el responsable de Hazte Oír ha relatado como entre seis u ocho personas vestidas de negro le han golpeado con una pizarra de precios del bar que se encuentra en la esquina de la Avenida 4 de Diciembre con Rafael de la Viesca.
A pesar del lugar y la hora, poco más tarde de las 12 de mediodía a escasos metros del Palacio Provincial de Diputación y el Edificio Roma, sede de varios departamentos de la institución provincial, la agresión apenas contó con testigos directos más que los propios miembros de Hazte Oír, a los que no hemos tenido acceso al marchar con el agredido al Hospital Puerta del Mar.
Sí hemos podido recoger el testimonio de un responsable del establecimiento que tan solo fue capaz de escuchar gritos, insultos y el golpe de la pizarra al encontrarse en el interior en el momento de los hechos. Un testigo que según ha manifestado a los medios de comunicación tan solo pudo ver en su huída a cuatro personas cubiertas con cascos de motocicleta y pasamontañas ataviados con prendas con el logotipo de Brigadas Amarillas.
En el momento de la agresión los manifestantes de los colectivos LGTB se encontraban en el interior de la plaza de España junto al monumento a las Cortes de Cádiz, al igual que los profesionales de los medios de comunicación.
Una de las incógnitas que deja el incidente es cómo las fuerzas del orden desplegadas en la zona no detectaron la presencia de los miembros de Hazte Oír ni de los supuestos agresores cuando se encontraban a escasos metros del lugar de la concentración. Que ambos grupos se encontraran por casualidad en un lugar en el que ni los miembros de la UPR ni los agentes de la Policía Local tenían controlado resulta más que llamativo.
Tras el suceso agentes de la Policía Local procedieron a identificar a algunos individuos congregados junto a los integrantes de los colectivos LGTB sin que haya trascendido ninguna detención hasta el momento.