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Hosteleros de Cádiz alertan de la «inseguridad» que genera la huelga del metal en plena temporada turística

El presidente de Horeca denuncia cancelaciones, temor a pérdidas económicas y llama a una regulación urgente del derecho a huelga ante los disturbios en la provincia

La huelga indefinida del sector del metal en la provincia de Cádiz, iniciada el 23 de junio, comienza a generar efectos colaterales sobre otros sectores económicos, especialmente el turístico y hostelero. Según ha denunciado este lunes Antonio de María, presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería de Cádiz (Horeca), la protesta sindical está provocando “inseguridad, alteración y dificultades”, afectando negativamente al funcionamiento normal del sector.

Uno de los primeros impactos tangibles ha sido la cancelación de la escala del crucero Ventura en el puerto de Cádiz. El consignatario de la embarcación justificó la decisión por “motivos de seguridad”, debido a las protestas y cortes de tráfico derivados de la huelga del metal, lo que ha generado gran preocupación entre los empresarios hosteleros ante posibles pérdidas económicas en plena temporada alta.

De María ha reconocido que “hay incertidumbre entre los hosteleros porque no se sabe cuánto puede durar esta situación”. Aunque aún no se han cuantificado los efectos en cifras, ha alertado de cancelaciones potenciales por parte de clientes que, al conocer los cortes de carreteras y puentes, pueden optar por evitar desplazarse a la provincia gaditana. “En hostelería la tranquilidad es clave, y si en Sevilla se enteran de que aquí hay huelga con cortes y disturbios, la gente se lo piensa antes de venir”, ha señalado.

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El presidente de Horeca ha calificado la huelga como “un chantaje directo”, al considerar que los métodos de presión empleados no solo perjudican a la hostelería, sino al conjunto de la ciudadanía. “No se puede ir contra los intereses generales cuando se defienden intereses particulares”, ha añadido, refiriéndose a los incidentes como la quema de contenedores o el corte de carreteras con neumáticos ardiendo.

En este contexto, De María ha instado a las autoridades a impulsar una ley de huelga que regule este tipo de movilizaciones. “Una manifestación no consiste en lanzar piedras, ni incendiar carreteras. Necesitamos normas consensuadas que permitan a cada uno defender sus derechos con sensatez y sentido común, no por la fuerza y la violencia”, ha concluido.

Las declaraciones del representante hostelero se producen mientras la huelga sigue provocando disrupciones en distintos servicios, incluyendo el portuario y el sanitario, y en un momento crucial para el turismo provincial, con miles de visitantes previstos en los próximos días.

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