La Comisión Europea, una de las principales instituciones de la Unión Europea, desempeña un papel clave en el proyecto europeo al representar los intereses comunes de los Estados miembros y velar por el cumplimiento de los tratados constitutivos. Su sede principal se encuentra en Bruselas, Bélgica, aunque cuenta con departamentos en Luxemburgo y oficinas en todos los Estados miembros de la UE.
Las funciones de la Comisión Europea son diversas e incluyen la propuesta de nueva legislación, la gestión de las políticas europeas y la asignación de fondos de la UE, así como la supervisión del cumplimiento de la legislación comunitaria en todos los Estados miembros. Además, representa a la UE en la escena internacional y participa en la negociación de acuerdos internacionales.
El Colegio de Comisarios, compuesto por veintisiete comisarios, uno por cada Estado miembro, bajo la dirección de un presidente de la Comisión, es el máximo órgano de decisión de la Comisión Europea. Los comisarios son responsables de carteras específicas y son designados tras las elecciones al Parlamento Europeo, con la aprobación del Parlamento y el Consejo Europeo.
La Comisión Europea se organiza en direcciones generales y agencias ejecutivas, que se encargan de desarrollar, aplicar y gestionar las políticas, la legislación y los programas de financiación de la UE. Los ciudadanos pueden interactuar con la Comisión Europea a través de la Plataforma de Participación Ciudadana, donde tienen la oportunidad de participar en debates sobre las políticas comunitarias y compartir sus puntos de vista.