Ya han pasado cinco meses desde que la plataforma SOS campiña de Jimena empezara su andadura, tras el conocimiento de los primeros megaproyectos fotovoltaicos proyectados en nuestra localidad y en la comarca en general. Durante este tiempo nuestra labor se ha centrado en informarnos e informar, hemos entablado contacto con todos los colectivos e instituciones que nos lo han permitido: Junta de Andalucía, mancomunidad, ayuntamientos, partidos políticos, asociaciones, diputados autonómicos, empresas y demás sectores implicados.
Tras estos meses, hemos presentado y continuamos presentando alegaciones a los proyectos, estamos agotando dentro de nuestras posibilidades los procedimientos administrativos, tenemos ya un gabinete jurídico que revisa nuestros procedimientos, y hemos llevado a cabo una campaña de información a la ciudadanía y a los medios de comunicación nacionales e internacionales.
Después de todo este trabajo, estamos en una curiosa situación: el número de proyectos que se presentan, no es que se haya estancado o disminuido, es que ha aumentado, llegando ya casi a las 3000 Has ( la mayor concentración fotovoltaica en España hasta la fecha), más tres parques eólicos, y una serie de solicitudes de proyectos de interés general por parte de las empresas, hecho que posibilita la expropiación de los terrenos afectados, en el caso de que esa declaración se lleve a cabo.
Tal y como anunciamos, ya en la primera asamblea informativa que tuvo lugar en la estación de Jimena, esta maquinaria empresarial, no para. Ha elegido nuestra localidad y comarca para desarrollar ampliamente sus intereses especulativos, el “BOOM” fotovoltaico ya ha estallado, y lo ha hecho ante nuestras narices. En esta tesitura, evidentemente solicitamos al gobierno Central, al autonómico y al municipal, que regule este desmadre especulativo, y que proteja a sus habitantes y al territorio, por que de otra forma nos abandonaran ante estas grandes empresas tan alejadas de nuestro territorio.
Todos somos en parte partícipes de este problema, algunos por inacción y otros por mostrar un apoyo directo, pero desde la plataforma, afirmamos que es nuestra administración local, la responsable última de que estos proyectos se lleven o no a cabo, sin estar sujetos a una regulación específica que aclare cuándo, cómo y dónde se pueden llevar a efecto las plantas fotovoltaicas, y sobre todo cuál sería el límite de Has. sostenible.
De esta forma en la situación actual, hacemos responsable al Ayuntamiento de Jimena, dada su reticencia a suspender las licencias, de lo que pueda ocurrir en nuestra localidad en lo que respecta a la extensión de las plantas fotovoltaicas y a su ubicación. El ayuntamiento, el alcalde y el grupo municipal que lo sustenta, puede y debe a nuestro juicio establecer una suspensión de licencias, tal y como lo están haciendo otros ayuntamientos, por que de lo contrario, si estos proyectos tienen una declaración ambiental positiva, estará atado de pies y manos ante los intereses de las empresas energéticas y entonces ya no valdrá ninguna de sus excusas. El daño será irremediable.