La playita de Zahara, ubicada en la sierra de Cádiz, se está convirtiendo estos días en un destino preferente para escapar de la ola de calor, que está registrando temperaturas cercanas a los 40 grados en la provincia, y también del fuerte viento de levante que ha saltado esta semana y que hace complicado el disfrutar de un día tranquilo de playa.
Así, entre el lunes y el martes de esta semana, han pasado por esta playita más de 2.700 personas, elevándose al aforo máximo de estas instalaciones durante el fin de semana, con 2.500 personas el sábado y el domingo, según datos aportados por su alcalde, Santiago Galván, a Europa Press.
Entre las claves de este «éxito», Galván ha señalado a que, aparte del agua natural sin tratar procedente del nacimiento del río, «la gente valora que es una zona acotada, rodeada de naturaleza, donde te puedes llevar tu comida». «Es cómodo y es una zona fresca», ha apuntado, añadiendo a que «igual te vas a la playa y es mucho más caluroso y no tienes nada donde resguardarte».
Los 70.000 metros cuadrados que conforman estas instalaciones, que cuenta también con zonas verdes, arboleda, mesas de obra, restaurante y juegos para los menores con tirolinas y otras atracciones, la convierten en un espacio demandado no sólo por los vecinos de pueblos gaditanos de su entorno sino también por personas de provincias cercanas.
«Viene mucha gente de los pueblos de Málaga y de Sevilla y la mayoría compra la entrada por Internet», ha explicado Galván, quien ha reconocido que poner en marcha este sistema de venta de entradas fue «un acierto» ya que los usuarios que planean pasar el día en la playita, lo hacen sabiendo que tendrán su sitio reservado.
No obstante, ha contado que, los fines de semana, que son los días de mayor afluencia, «hay personas esperando en la entrada a que salga gente para poder acceder», por eso mismo, ha recomendado visitar y disfrutar de sus instalaciones entre semana, «que se está más tranquilo».
En el verano de 2022 acudieron 71.000 personas, un aumento significativo respecto a 2021, cuando la cifra fue de 59.000 usuarios. Este año las previsiones se sitúan cercanas a las registradas el verano pasado, como ha avanzado Galván, haciendo hincapié en que los meses de junio y julio «han sido incluso un poco mejor», pero aclarando que las dos semanas de levante que se dieron en agosto de 2022 benefició al aumento de visitantes.
Pese a esa gran afluencia, el alcalde zahareño ha subrayado la ausencia de problemas, ya que «suele reinar la convivencia y el respeto entre los usuarios» que acuden a esta playa urbana de la sierra de Cádiz.
En los últimos años el Ayuntamiento de Zahara, con su alcalde socialista al mando, han invertido en torno a 300.000 euros para adaptar y mejorar esta playita y para la contratación de personal. En concreto, el Consistorio da trabajo a 20 personas, de las que nueve son socorristas, para así garantizar que no se produzcan incidentes en la zona de baño.