El rector de la Universidad de Cádiz, Francisco Piniella, ha publicado una resolución que recoge las directrices sobre la adaptación al formato no presencial de las prácticas externas curriculares, dirigida a escuelas y facultades de la UCA que conforman los “centros encargados de la organización de las enseñanzas y de los procesos académicos, administrativos y de gestión conducentes a la obtención de títulos de grado”. Las adaptaciones deberán quedar reflejadas en una adenda a la guía docente.
De este modo, los centros académicos de la UCA, a través de sus coordinadores de prácticas y en colaboración con los tutores académicos, revisarán la planificación de las prácticas externas curriculares, analizarán la situación de cada estudiante matriculado en ellas y desarrollarán un plan específico, con un calendario y una metodología, para adaptarlas a una modalidad no presencial, bien mediante metodologías formativas alternativas en un entorno virtual, acordado con los tutores de las entidades colaboradoras, bien mediante su sustitución por otras actividades complementarias que permitan adquirir las competencias específicas de la asignatura.
Aquellas prácticas, cuya adaptación o sustitución por otras actividades no sea posible, podrán ser reconocidas por la Comisión de Garantía de Calidad de cada centro si las actividades presenciales realizadas permiten alcanzar un volumen razonable de resultados de aprendizaje que garanticen una adquisición suficiente de las competencias, o bien ser completadas o sustituidas mediante el aprendizaje con otro tipo de actividades (proyectos, memorias, programas formativos, etc.) que puedan ser evaluadas, siempre y cuando permitan adquirir las competencias correspondientes.
En este sentido, la Dirección General de Emprendimiento, Empresa y Egresados y la Dirección del Centro de Promoción de Empleo y Prácticas de la UCA han desarrollado una oferta formativa complementaria para que los responsables de los centros y de coordinación de los títulos puedan considerar incluirlas en las adendas en sus guías docentes.
La adaptación de las prácticas curriculares que ha resuelto la UCA se enmarca dentro de las recomendaciones del Real Decreto 463/2020 por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria y que establece la suspensión de la actividad educativa presencial en todos los centros y etapas, ciclos, grados, cursos y niveles de enseñanza, incluida la enseñanza universitaria, así como cualesquiera otras actividades educativas o de formación impartidas en otros centros públicos o privados. Recoge, igualmente, las directrices del Documento Marco para la adaptación de la docencia y evaluación en las universidades andaluzas a la situación excepcional provocada por el Covid-19. Atiende a los criterios de la Red Española de Agencias de Calidad Universitaria (REACU) y se alinea con lo dispuesto en la resolución del rector de la UCA (UCA/R45REC/2020) por la que se aprueban los criterios académicos de adaptación del formato presencial al formato no presencial de la docencia.