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Cádiz

La Universidad de Cádiz refuerza la prevención del suicidio con una formación especializada para su personal

El Servicio de Atención Psicológica de la UCA imparte una formación pionera dirigida al PDI y PTGAS para mejorar la detección y el abordaje de conductas suicidas dentro del entorno universitario.

La Universidad de Cádiz ha dado un paso importante en su compromiso con la salud mental al poner en marcha una formación especializada para prevenir el suicidio, impartida por su Servicio de Atención Psicológica y Psicopedagógica (SAP). La iniciativa, dirigida al Personal Docente e Investigador (PDI) y al Personal Técnico, de Gestión y de Administración y Servicios (PTGAS), busca dotar a los profesionales de herramientas eficaces para actuar ante posibles situaciones de riesgo suicida.

Esta acción, desarrollada en junio de 2025, responde a una necesidad creciente de ofrecer recursos formativos a quienes trabajan en contacto directo con estudiantes y miembros de la comunidad universitaria. A través de un enfoque práctico y científico, el programa pretende fortalecer la capacidad de respuesta ante uno de los grandes retos de salud pública de nuestro tiempo.

La formación sobre prevención del suicidio se ha estructurado en dos módulos principales. El primero de ellos, titulado «Construyendo puentes: prevención y actuación ante el riesgo de suicidio», proporciona estrategias para reconocer señales de alerta, mantener una comunicación empática y activar protocolos de intervención. Está especialmente orientado a profesionales que, por su labor diaria, puedan encontrarse en situaciones en las que una detección temprana sea crucial.

Este módulo se basa en metodologías respaldadas por la evidencia científica, con especial atención a la desestigmatización del suicidio y la creación de entornos de apoyo seguros y coordinados. Desde la escucha activa hasta el establecimiento de canales de derivación adecuados, se aborda el suicidio como una realidad que puede y debe afrontarse desde la prevención.

El segundo módulo, bajo el título «Herramientas emocionales para el apoyo: gestionando emociones ante situaciones sensibles», se centra en el cuidado de quienes prestan ayuda. Reconociendo el impacto emocional que puede tener el acompañamiento en crisis, el curso ofrece técnicas de regulación emocional, autocuidado y afrontamiento saludable. Su objetivo es evitar el desgaste profesional y fomentar la resiliencia institucional.

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Ambos bloques formativos subrayan la importancia de generar una cultura universitaria más abierta y proactiva en torno a la salud mental, favoreciendo una comunidad preparada para identificar, entender e intervenir en situaciones de vulnerabilidad.

Con esta formación, la Universidad de Cádiz se posiciona como referente en el ámbito universitario andaluz y nacional, apostando por la educación emocional como vía de protección y cuidado integral de su comunidad. Desde el SAP, se destaca que el objetivo es “tejer una red de apoyo sólida, donde cada persona sepa cómo actuar ante señales de sufrimiento emocional grave”.

La medida se enmarca en una estrategia institucional más amplia que promueve el bienestar psicológico y la intervención temprana frente a factores de riesgo. Esta apuesta por la prevención del suicidio en la universidad forma parte de una tendencia creciente en el sistema educativo superior, que reconoce el papel esencial de las universidades en la promoción de la salud mental.

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