El Colegio Oficial de Psicología de Andalucía Occidental hace este año hincapié en visibilizar este tipo de maltrato y en la relevancia de la formación en materia de perspectiva de género de todos los profesionales implicados en este ámbito con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer
La visibilidad de la violencia psicológica en la violencia de género como un maltrato sutil y diverso que se ejerce a lo largo del tiempo es el aspecto sobre el que hace hincapié este año el Colegio Oficial de Psicología (COP) de Andalucía Occidental en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora cada final de noviembre.
Además de sensibilizar sobre la importancia de detectar la violencia psicológica contra la mujer ya que puede constituir la antesala de otros tipos de violencia, el Colegio Oficial, con delegaciones en las provincias de Cádiz, Huelva, Córdoba y Sevilla, enfatiza la relevancia de la formación en materia de perspectiva de género que deben adquirir los/as diferentes profesionales que trabajan con víctimas o en cualquier ámbito de la violencia machista.
En este sentido, desde el Área de Psicología y Género del COP Andalucía Occidental se destaca la amplia diversidad de manifestaciones de violencia psicológica como la llamada “Luz de gas” o acoso sutil y constante que altera la percepción de la realidad de la mujer que lo sufre; la manipulación continua con muestras de afecto intermitente; o el progresivo control de las relaciones sociales en búsqueda del aislamiento.
La coordinadora del Área “Psicología y Género” del COP Andalucía Occidental, Toñi Alba, explica que ante el temor a la discusión y al conflicto, la mujer víctima de violencia psicológica puede sufrir, entre otras consecuencias, la bajada y anulación de la autoestima, el aumento de la inseguridad en sí misma, la autoinculpación, la alteración del sueño o la dificultad para tomar decisiones. En un modo más avanzado, también puede sufrir falta de concentración, de ilusión o de cuidarse estéticamente, depresión o trastornos de conducta alimentaria, entre otros.
Violencia de género y reconocimiento de conductas tóxicas
La violencia de género se puede manifestar de muchas formas: violencia física, que es la más reconocida, violencia económica, sexual, social, ambiental, patrimonial y violencia psicológica. De todas ellas, la psicológica junto a las conductas tóxicas asociadas es la menos visible, la que está presente cuando suceden otros tipos de violencia y la primera en aparecer.
Estas conductas tóxicas que constituyen violencia psicológica y pueden ir asociadas a una gran diversidad de cuestiones cotidianas sin que se verbalice o se exprese de forma explícita: menosprecio de la opinión de la mujer, forma de vestir, valoraciones sobre las amistades, etc.