‘Los hermanos del Buen Fin’ logran cautivar al público con su humor y crítica social en los cuartos de final del COAC 2025
La chirigota Los hermanos del Buen Fin de La Rinconada (Sevilla) dejó una huella notable en los cuartos de final del COAC 2025, con una actuación marcada por su característico humor inteligente y crítica social. Con letra y música de Antonio Álvarez ‘Bizcocho’ y bajo la dirección de Ernesto Javier Urmeneta Montiel, la agrupación volvió a sorprender al público con su propuesta surrealista y arriesgada.
El concepto de la chirigota gira en torno a una secta ficticia, donde se mezcla la actualidad con situaciones del propio Concurso. En los pasodobles, Los hermanos del Buen Fin no dudaron en abordar temas controvertidos con una mezcla de ironía y crítica mordaz. En el primero, se centraron en la figura de los bancos, ironizando sobre cómo han cambiado su trato a los clientes: «Antes daban cacerolas, ahora no dan nada a menos que vayas con una pistola». La crítica culmina con una afirmación audaz, sugiriendo que los bancos son una «secta» por su impunidad. El segundo pasodoble causó algo de controversia al abordar la relación entre las banderas y los conflictos bélicos, un tema arriesgado pero que fue resuelto con un toque de provocación.
Los cuplés fueron una mezcla de buen humor y golpes cómicos. El primero hizo referencia a los problemas capilares de Rafa Nadal, con un chiste visual que causó risas. El segundo cuplé bromeó con las traducciones de Canal Sur, específicamente sobre la frase «que se les seque la hierbabuena», dejando claro el estilo irreverente de la chirigota. El estribillo, pegadizo y cargado de golpes, mantuvo el ritmo de la actuación.
El popurrí ofreció humor sin pausa, jugando con palabras y situaciones absurdas, un sello distintivo del Bizcocho. Aunque el tipo era sencillo, la interpretación extravagante de los componentes logró potenciar el efecto cómico y mantener la atención del público.
La actuación de Los hermanos del Buen Fin mejoró respecto a las preliminares, logrando una mayor conexión con el público. A pesar de los temas polémicos en los pasodobles, la chirigota logró mantener un equilibrio y logró risas constantes y una ovación final. Aunque los cuplés fueron algo desiguales, la entrega del público y el buen nivel de los pasodobles posicionan a la agrupación como una de las favoritas en la pelea por llegar a la final del COAC 2025.
