El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, se ha pronunciado este miércoles sobre la huelga en la factoría de Acerinox en Algeciras (Cádiz) para considerar que se trata de «un problema grave, severo que nos ocupa, nos preocupa», mientras ha defendido que la opción que ha elegido el Gobierno andaluz para afrontar este problema laboral es «trabajar de manera discreta».
Frente a la posibilidad de «buscar votos con el sufrimiento de los demás», Moreno ha asegurado «trabajar en beneficio del interés general».
Ante una pregunta del portavoz del Grupo Mixto-Adelante Andalucía, José Ignacio García, quien se ha puesto una prenda de un trabajador de Acerinox, Moreno ha reivindicado el papel desempeñado por el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (SERCLA) con la celebración de 20 reuniones de mediación entre empresa y trabajadores.
«Estamos tratando, cumpliendo nuestro papel institucional y estatutario, intermediar», ha afirmado Moreno, quien ha asegurado «que queremos se solucione lo antes posible» este conflicto laboral, antes de advertir de sus consecuencias negativas para ambas partes, por cuanto los trabajadores no cobran y «la empresa puede cerrar», así como ha señalado la repercusión sobre «muchos otros trabajadores de la industria auxiliar».
José Ignacio García ha explicado que la huelga en la fábrica campogibraltareña de Acerinox llega ya «a los 115 días de huelga, casi cuatro meses sin cobrar peleando por un convenio digno», mientras ha recordado que Acerinox presenta 228 millones de beneficios, por lo que ha instado a Moreno a que «se ponga de parte de los trabajadores» tras poner de manifiesto que «son los que lo votaron y no se ponga de parte de la multinacional, cuyos intereses están muy lejos de aquí».