La OPP72 impulsa la descarbonización de su flota artesanal para liderar la transición ecológica en el sector pesquero gaditano

La Organización de Productores Pesqueros Artesanales Lonja de Conil pone en marcha un proyecto pionero que busca reducir emisiones, mejorar la eficiencia energética y reforzar la sostenibilidad de la pesca local.

La Organización de Productores Pesqueros Artesanales Lonja de Conil (OPP72) ha iniciado un proyecto estratégico de descarbonización de su flota artesanal, con el objetivo de reducir las emisiones, mejorar la eficiencia energética y consolidar un modelo de pesca sostenible en el Golfo de Cádiz. La iniciativa sitúa a la entidad en la vanguardia de la transición ecológica dentro del ámbito pesquero andaluz, al promover una actividad compatible con el respeto al medio ambiente y el desarrollo sostenible del litoral gaditano.

El proyecto, integrado en los Planes de Producción y Comercialización (PPYC2025), persigue tres metas principales: la sostenibilidad ambiental, mediante la reducción progresiva de los gases de efecto invernadero; la eficiencia energética, optimizando el consumo y los costes operativos de las embarcaciones; y la competitividad del sector pesquero local, fortaleciendo su posición en los mercados gracias a la innovación y la responsabilidad ambiental.

La OPP72 considera esencial anticiparse a las nuevas demandas normativas y sociales en materia de sostenibilidad. “La pesca artesanal puede y debe ser parte activa en la lucha contra el cambio climático”, señalan desde la organización, que defiende que la transición energética es una oportunidad para reforzar el futuro económico y social de las comunidades costeras.

El plan incluye un diagnóstico exhaustivo de la flota artesanal asociada a la OPP72, con el fin de evaluar los patrones de consumo energético, analizar los sistemas de propulsión y detectar las áreas de mejora. Para ello se realizarán entrevistas con armadores, observaciones en puerto y estudios técnicos sobre motores, hélices, sistemas eléctricos y hábitos de navegación. Además, se estudiarán casos de éxito nacionales e internacionales para elaborar recomendaciones adaptadas a la flota del Golfo de Cádiz, compuesta principalmente por embarcaciones de pequeña y media eslora dedicadas a artes selectivas como el trasmallo y el palangre.

El proyecto va más allá del análisis teórico y busca ofrecer una hoja de ruta práctica hacia una pesca más limpia y eficiente. Entre las medidas evaluadas se incluyen la implantación de sistemas híbridos o eléctricos, el uso de energías renovables tanto a bordo como en puerto, la optimización de cascos y hélices para reducir el consumo de combustible y la digitalización de la gestión energética mediante herramientas de seguimiento y control.

Con esta iniciativa, la OPP72 pretende demostrar que pesca artesanal y sostenibilidad ambiental pueden ir de la mano, abriendo nuevas oportunidades de desarrollo y reforzando el prestigio del sello “Pescado de Conil” como producto responsable y de proximidad.

Los responsables del proyecto destacan que esta experiencia puede convertirse en un modelo replicable para otras flotas artesanales de España y Europa que afrontan retos similares, como el aumento de los costes energéticos y la necesidad de reducir la huella de carbono. “Esta iniciativa representa una apuesta por un futuro más limpio, justo y competitivo, en el que la pesca artesanal siga siendo motor económico, social y cultural del litoral gaditano”, subrayan.

La Organización de Productores Pesqueros Artesanales Lonja de Conil (OPP72) gestiona la actividad de su flota en los puertos de Conil, La Atunara y Rota, promoviendo la pesca responsable, la trazabilidad y la comercialización bajo la marca colectiva “Pescado de Conil”. Su compromiso con la innovación, la modernización y la sostenibilidad consolida su papel como referente del sector pesquero andaluz.