Mundialmente son conocidos ciertos rituales para atraer la buena suerte y el empleo de muchos de ellos se está disparando
Geográficamente hablando existen en todo el mundo, en cada zona con sus peculiaridades basadas en culturas ancestrales, influenciadas por las religiones y costumbres, pero en todo caso lo que está claro es que no existe rincón en el mundo donde no se realicen rituales de algún tipo para atraer esas energías cósmicas. No ha hecho falta poner de acuerdo al mundo, todos lo hacen, con sus variantes eso sí, lo cual da que pensar si realmente funcionan y es muy probable que funcionen aunque solo sea por autosugestión o efecto placebo.
Cada vez lo reconocen más abiertamente en el mundo de los artistas, cantantes, influencers, etc. les atrae a los grandes directivos y empresarios y como no, los políticos que también se suman a esta clara tendencia de buscar la suerte, no sólo a base de esfuerzo, trabajo y dedicación sino también con una ayuda extra en forma de rituales que dicen captar energías positivas.
Es en estos momentos de incertidumbre por la pandemia, la globalización (que más parece una maldición) que proliferan con más fuerza las ceremonias esotéricas encaminadas a ese “sálvese quien pueda” y no se habla de un tipo de persona de nivel cultural medio o bajo como es posible imaginar sino gente culta y adinerada, con poder muchos de ellos.
La realidad es que no se tiene claro si influye o no, si es un efecto placebo o simple predisposición a intentar mejorar pero lo que es cierto es que, como aquel que sale de una sesión con su psicoanalista con las pilas puestas parece que este tipo de ceremonias orientadas a atraer suerte tienen cada vez más adeptos.
Existen ceremonias de todo tipo, simples y complejas, modernas y ancestrales y como no, ya adaptadas a las nuevas tecnologías de tal forma que al igual que con el teletrabajo, ya no es necesario salir de casa para proceder a realizar un ritual sino que lo harán por cada uno online, sin la presencia de la persona en cuestión, solo identificando a la persona y con la “garantía del procedimiento utilizado” al ser éste grabado en video como hacen en algunas páginas. Muy interesante la adaptación a la época actual aunque los rituales a distancia siempre han existido fundamentalmente a través de amuletos, objetos personales u orgánicos del protagonista del ritual.
Lo que está claro es que actualmente se encuentra muy al alcance de la mano y con total discreción, algo que para este tipo de actividades es fundamental porque la inmensa mayoría de los usuarios no contemplan la posibilidad de airear sus prácticas ni siquiera a los más allegados.