El Consejo de Administración de Cádiz 2012 se reunió en la tarde de ayer y acordó, por unanimidad, elevar a la Junta General la propuesta de disolución de esta empresa municipal, ya que jurídica y económicamente el Ayuntamiento está obligado a ello al acumular dos años de pérdidas económicas. Así, será el Pleno del Ayuntamiento de Cádiz, que es la Junta General de la sociedad, el que tendrá la última palabra sobre el futuro de Cádiz 2012.
Este ente municipal lleva dos años consecutivos con pérdidas económicas, y la Ley de Estabilidad Presupuestaria ordena la disolución de aquellas sociedades municipales que tengan dos años consecutivos con pérdidas. Asimismo, la Ley de Sociedades de Capital obliga a disolverla con esa cuenta de resultados.
De igual manera, se han seguido dos informes de la Intervención Municipal del año 2013 con modificación el 2014 en los que aconsejaba su disolución al no existir un fin que justificara su mantenimiento.
Cádiz 2012 es la única de las ocho sociedades municipales que no recibe ingresos más allá de los que se le puede suministrar desde el propio Ayuntamiento.