Consumo alerta sobre los riesgos de conectarse a redes wifi públicas sin protección
Las redes abiertas exponen los dispositivos y facilitan el robo de datos personales y bancarios; se recomienda el uso de VPN y extremar las precauciones

Con motivo del Día Mundial del Wifi, la Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía ha emitido una serie de recomendaciones para alertar a la ciudadanía sobre los riesgos de conectarse a redes wifi públicas sin medidas de seguridad. Estas conexiones, muy habituales en lugares como aeropuertos, cafeterías, hoteles o parques, pueden suponer una grave amenaza para la seguridad de los datos personales y bancarios de los usuarios.
A diferencia de las redes domésticas, que si están bien configuradas y actualizadas ofrecen un nivel aceptable de protección, las redes wifi abiertas no requieren contraseña ni autenticación. Esto permite que cualquier persona pueda conectarse, exponiendo los dispositivos a ataques informáticos, suplantaciones de identidad o intercepciones de comunicaciones sensibles.
Según alertan desde Consumo y organismos como el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), los ciberdelincuentes aprovechan estas redes para interceptar información transmitida —como contraseñas, datos bancarios, correos electrónicos o mensajes— o incluso crear redes trampa que imitan a las legítimas, logrando que los usuarios se conecten sin sospechar del fraude.
Uno de los métodos más utilizados es el llamado ataque ‘man-in-the-middle’ (MitM), donde el atacante se posiciona entre el dispositivo y la página web a la que se intenta acceder, capturando los datos intercambiados.
Desde la Consejería de Salud y Consumo se desaconseja totalmente realizar compras online, operaciones bancarias o rellenar formularios con datos personales mientras se navega en una red wifi pública sin protección. Tampoco se recomienda introducir credenciales en servicios web que no cuenten con cifrado, es decir, cuya URL no comience por https.
Para mejorar la seguridad, se recomienda tener siempre actualizados los dispositivos y las aplicaciones, modificar la contraseña del router doméstico por defecto y, especialmente en redes públicas, utilizar redes privadas virtuales (VPN). Las VPN cifran la conexión, impidiendo que terceros puedan interceptar los datos enviados o recibidos.
Asimismo, las redes públicas cerradas —que requieren contraseña aunque sean compartidas en espacios como hoteles o centros educativos— ofrecen una mayor protección, pero aún así exigen cautela. El uso responsable de internet y la concienciación sobre la ciberseguridad se presentan como herramientas fundamentales para evitar ataques y proteger la privacidad digital.
Estas advertencias se enmarcan en una campaña informativa impulsada desde la Junta de Andalucía, que busca fomentar buenas prácticas en el uso de tecnologías inalámbricas y reducir la exposición de los ciudadanos a ciberataques, cada vez más frecuentes en entornos públicos.