En 2020, se denunciaron 140 agresiones, tanto físicas como verbales en la provincia de Cádiz, según los datos de la administración sanitaria
El sector de Sanidad de CSIF Cádiz exige “tolerancia cero” frente a las agresiones que sufren los profesionales del sistema sanitario andaluz y que en 2020, en la provincia de Cádiz, fueron un total de 140, según los datos del Servicio Andaluz de Salud. De éstas, el 90% fueron verbales (amenazas, insultos, trato degradante, etcétera).
Con motivo de la celebración este viernes, 12 de marzo, del Día Europeo contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, el sindicato, que es la primera fuerza sindical multiprofesional del SAS, ha querido hacer hincapié especialmente en las agresiones verbales que ocurren diariamente por teléfono, que ha sido la vía preferente de comunicación por las restricciones derivadas de la Covid-19.
El responsable de Sanidad de CSIF Cádiz, Alberto Puyana, ha resaltado que “como consecuencia de la pandemia, el aumento de los contagios, la presión hospitalaria, la situación de la Atención Primaria, con gran déficit de medios humanos, la crispación y la incertidumbre, en muchas ocasiones, han sido el caldo de cultivo perfecto para este tipo de agresiones, sobre todo en los centros de salud y en las urgencias hospitalarias”.
CSIF puso en marcha hace un mes una campaña bajo el lema “Ante una agresión verbal, HABLA”, para animar a los profesionales del sistema sanitario a comunicar las agresiones verbales que sufren y cuya declaración se ha reducido considerablemente durante 2020, “no porque no se hayan producido, sino porque los profesionales no las han denunciado”.
En concreto, se trata de situaciones de malos modos, insultos y trato degradante hacia los profesionales que se producen por teléfono y que, precisamente por eso, en muchas ocasiones no son percibidas por el trabajador o trabajadora como una agresión, cuando en realidad lo son. Puyana ha advertido de la importancia de denunciar estas “teleagresiones”, pues si no se declaran, no se registran, y por lo tanto, no se pueden adoptar medidas para evitar que sucedan.
Por otro lado, CSIF lamenta que la Consejería de Salud de la Junta no haya respondido a la petición del sindicato –que presentó hace un año- para introducir una serie de modificaciones de la ley de Salud Pública de Andalucía que adecuaran el régimen sancionador establecido ante casos de agresiones a los empleados públicos que trabajan en centros del Sistema Sanitario Público de Andalucía a la realidad actual, de manera que sirva de medida disuasoria frente a conductas de este tipo”.
Que la Consejería actúe de oficio en casos muy graves
Asimismo, CSIF proponía un nuevo apartado en la citada norma para que en los supuestos referidos a las infracciones muy graves, la competencia para iniciar, instruir y resolver los procedimientos sancionadores, así como el ejercicio de la potestad sancionadora corresponda a los órganos de la Consejería.
Otro de los cambios que defiende la central sindical es incluir en la citada ley un nuevo apartado con el que quedaría incluido todo el personal del sector público que trabaja en estos centros.