José María Román resalta el trabajo de la Sociedad Gaditana de Historia Natural en el proyecto Limes Platalea, para la observación y estudio de la migración de 20.000 aves de Europa a África
El alcalde de Chiclana, José María Román, ha inaugurado la veleta dedicada a las espátulas, ubicado en la Loma del Puerco, junto al Cuartel del Mar, obra de Chiqui Díaz. Un acto en el que también han estado presentes las delegadas municipales de Playas y Turismo, Ana González y Pepa Vela respectivamente, así como el presidente de la Sociedad Gaditana de Historia Natural, Íñigo Sánchez; uno de los coordinadores del proyecto Limes Platalea, Javier Ruiz; y el fundador de Azotea Grupo, José Manuel García.
Durante el acto, José María Román ha señalado que “hoy es un buen día para llevar a cabo esta inauguración, porque mañana conmemoramos el Día Mundial de las Aves”. “Estamos en un municipio que ha recibido recientemente el premio de Destino de Excelencia Turística, puesto que trabajamos por hacer compatible el desarrollo turístico con acciones como ésta o la ruta fenicia que se inicia aquí al lado”, ha manifestado el alcalde, quien ha recordado las actuaciones municipales para la adquisición de espacios naturales.
“Estar rodeado hoy de los responsables de la Sociedad Gaditana de Historia Natural y de otras personas como el director del Parque Natural o del propio Manuel Marcel, responsable durante muchos años del Zoo de Jerez y de que el campo de golf de Novo Sancti Petri esté lleno de ibis eremitas, es un privilegio, puesto que gente así han llevado a Cádiz a ser una provincia única”, ha expresado el regidor chiclanero, quien ha recalcado que “esta veleta de las espátulas no es la única obra que tendremos de Chiqui Díaz, porque también está trabajando en el monumento que tendremos en la rotonda junto al centro comercial Tartessus”.
Además, el alcalde ha incidido en que “vamos a seguir trabajando en ese equilibrio del medio natural, que debe continuar”. “Esas 20.000 espátulas que se despiden de Europa aquí para ir a África es una enorme fortuna, al igual que sucede con todo lo que nos ofrece la provincia de Cádiz, con una biodiversidad como pocas y que cuenta con un 38 por ciento de espacios protegidos”, ha comentado José María Román, quien ha añadido que “debemos seguir haciendo cosas”.
Por su parte, Íñigo Sánchez ha resaltado que “esta escultura supone un paso más al trabajo de la Sociedad Gaditana de Historia Natural”. “Agradecer a los voluntarios del proyecto Limes Platalea y a instituciones como el Ayuntamiento de Chiclana, que con su colaboración han hecho posible llevar a cabo el estudio de estas aves migratorias”, ha expresado el responsable de la entidad.
Asimismo, Javier Ruiz ha explicado el trabajo que se ha llevado a cabo en el proyecto Limes Platalea. “Para nosotros esta veleta supone muchas cosas, pero sobre todo una bandera por el triunfo que se puede conseguir”, ha expresado uno de los coordinadores del proyecto, quien ha recalcado que “se trata de un proyecto de ciencia ciudadana”.
Finalmente, José Manuel García ha agradecido a Javier Ruiz y a su compañero Francisco Hortas “el trabajo realizado durante este tiempo, en el que nosotros hemos puesto en marcha el Cuartel del Mar, donde hemos cedido una parte de nuestro espacio para esta obra”. “Aunque no sea de Chiclana, me siento chiclanero, por lo que en aquellas cosas que podamos hacer por la ciudad ahí estaremos”, ha comentado.
Limes Platalea
Han pasado 11 años desde que el Proyecto Limes Platalea de la Sociedad Gaditana de Historia Natural descubriera para la ciencia el lugar del ‘salto’ hacia África de la espátula común por el corredor migratorio Playa de la Barrosa-Cabo Roche. Un continuado trabajo de ciencia ciudadana que permite monitorear prácticamente a toda la población atlántica de esta amenazada ave que migra hacia el continente africano.
Cada temporada, 20.000 espátulas confieren a la Torre del Puerco el ser el mejor lugar de Europa para observarlas en migración. Con la particularidad de acontecer aquí, en plena temporada estival y frente a decenas de miles de veraneantes.
Con esta escultura quieren agradecer permanentemente a los centenares de personas que han hecho y siguen posibilitando el estudio de este hermoso espectáculo natural, permitiendo conocer en todo momento los vientos predominantes en este corredor migratorio. Pero también fijar en la memoria colectiva de Chiclana su nuevo símbolo identitario. Esto se suma a sus vinos, salinas, esteros… pero con la particularidad de que, frente a otros destinos de sol y playa, esta bella migración hace a la playa de la Barrosa un lugar único. Es lugar de parada obligada para el turismo ornitológico, entre la paradigmática Doñana y el Estrecho de Gibraltar.