El alcalde y el presidente de la asociación han suscrito hoy el convenio por el que se formaliza la cesión gratuita del local municipal por un periodo de cuatro años, prorrogable otros cuatro
El alcalde de Cádiz, José María González, y el presidente de la Asociación Romanceros del Carnaval de Cádiz, Antonio Beiro, han suscrito hoy un convenio de colaboración y de cesión temporal del uso de un local municipal en el que dicha asociación establecerá su sede y desarrollará actividades culturales y formativas dirigidas a escolares y a la sociedad gaditana en general que permitan la transmisión de los saberes que atesora la modalidad.
Tal y como recoge el convenio, con la cesión gratuita del uso del local -ubicado en el Bajo Izquierda del número 5 de la calle Regimiento de Infantería-, el Ayuntamiento cumple con el objetivo de potenciar las vías de cooperación con asociaciones y entidades cuyos fines persigan la promoción del bienestar social de la ciudadanía y se basen en razones de tipo sociocultural.
Cabe recordar que la Junta de Gobierno Local del pasado 12 de mayo aprobó la cesión de uso del citado local, coincidiendo las partes firmantes en la necesidad de realizar una labor de colaboración en el fomento y difusión de la cultura. Así, la cesión se efectúa para la ubicación de la sede y el desarrollo por parte de la Asociación Romanceros del Carnaval de Cádiz de programas relacionados con la promoción y bienestar cultural de la ciudadanía, los cuales tendrán carácter gratuito y de interés público.
Conforme a los fines estatutarios de la asociación, se desarrollarán actividades formativas que permitan la transmisión de los saberes que atesora la modalidad de romanceros; talleres para jóvenes en edad escolar a realizar en los centros educativos y en la propia sede de la asociación, que permitan conocer la historia, trayectoria, evolución, técnicas y particularidades del mundo del romancero; además de la colaboración en actividades y eventos que se organicen desde el Ayuntamiento en relación al romancero.
La cesión se otorga por un plazo de cuatro años, prorrogables de forma expresa por otros cuatro, mediante acuerdo del Pleno municipal que acredite la conveniencia u oportunidad de la continuidad de la cesión del bien; sin que, en ningún caso, la duración total pueda exceder de ocho años.