El partido se disputará a puerta cerrada y será televisado en directo por Onda Cádiz TV y RFAF TV
El Cádiz CF Virgili afronta este sábado a las 19:30 horas en el Pabellón Mirandilla-Campo del Sur de la capital gaditana, el partido ante el CD Bujalance FS correspondiente a la jornada 16 del Subgrupo 5A de Segunda División B FS, la antepenúltima de esta primera fase del campeonato liguero. Un partido que se disputará a puerta cerrada y que será televisado en directo por Onda Cádiz TV y RFAF TV.
Los amarillos jugarán ante un equipo que le puso las cosas bien complicadas en el partido de ida, en el que perdió por 5-3 tras una remontada de los cordobeses tras ir ganando por 1-3 en la primera mitad.
Pepe Narváez considera este partido como una «final» de cara a la consecución del primero de los objetivos de la temporada, que es quedar entre los cuatro primeros y advierte que el rival «es un equipo que está acostumbrado a las remontadas en las segundas partes y con el que no te puedes relajar, con jugadores veteranos como los hermanos Catiti, Cristóbal, Antoñito o Zafra han dado un pasito al frente conscientes de que se pueden meter de lleno por la pelea por los playoffs».
El técnico considera que para poder conseguir un resultado positivo «tenemos que ser muy inteligentes y hacer un partido desde el control mental. Ellos tienen que conseguir los tres puntos sí o sí para mantenerse arriba, mientras que nosotros tenemos que jugar con la ilusión y la responsabilidad de que esta semana podemos certificar la clasificación para la segunda fase. El equipo que mejor controle ese control emocional ganará el partido».
El Cádiz CF Virgili llega «con una buena dinámica, tras haber forjado una identidad, tal y como lo demostró el equipo ante el Xerez DFC Futsal y el Jaén FS B. Contra Bujalance podemos certificar esa clasificación y seguir luchando final a final por cotas mayores».
La convocatoria se decidirá a última hora, estando todos los jugadores disponibles para el técnico, incluyendo al portero Pepe Sánchez, cuya lesión en Jaén quedó en un susto.