El Equipo de Gobierno va a realizar una donación a la Flampa Gades para que se adquieran medidores de CO2 y se repartan entre los centros públicos de la ciudad para verificar que la ventilación es la correcta y poder así cerrar las ventanas de las aulas durante mayor tiempo
La concejala de Enseñanza del Ayuntamiento de Cádiz, Ana Fernández, se reunió ayer por videoconferencia con dos representantes de la Coordinadora de la Escuela Pública, María Rosa Sastre y Marta Solana, y con la presidenta de la Flampa Gades (Federación de Asociaciones de Madres y Padres de la Escuela Pública de Cádiz), Mariam Gil, para abordar la difícil situación que están viviendo los centros educativos con motivo de la ola de frío y la necesidad de mantener abiertas las ventanas y puertas de las aulas por la pandemia, tal y como establece el protocolo Covid para las escuelas.
Esta reunión fue solicitada de forma urgente el pasado martes por ambas entidades a la concejala de Enseñanza, y hoy se han entrevistado con el delegado territorial de Educación en Cádiz, Miguel Andreu, tras mes y medio esperando una reunión que volvieron a pedir la semana pasada ante la urgencia provocada por las bajas temperaturas.
Las representantes de la Coordinadora y de la Flampa trasladaron a la edil la “insostenible situación” que está viviendo el alumnado en las aulas, con corrientes de aire y temperaturas entre los 2 y los 4 grados, por lo que consideran necesario la instalación de medidores de CO2 en las aulas para poder, al menos, cerrar durante un rato las ventanas de forma segura para el alumnado, ya que el medidor avisa cuando se consigue la cantidad de oxígeno óptimo, y hay estudios que demuestran que con 15 minutos que se aireen las aulas en los recreos resulta suficiente. Es por ello que han trasladado hoy al delegado de Educación de la Junta de Andalucía esta petición.
Desde la Coordinadora y la Flampa lamentaron que el Gobierno andaluz no haya hecho nada para evitar o mitigar esta situación, puesto que se sabía que las temperaturas iban a bajar con la llegada del invierno, como es lógico. Pidieron por ello reunión hace mes y medio, pero hasta hoy no han sido atendidas por el delegado de Educación.
Ante esto, la concejala de Enseñanza critica que la Junta “de nuevo va tarde y sigue improvisando, sin aportar un solo euro para poner en marcha medidas o buscar soluciones para evitar que los niños y las niñas estén dando clases con temperaturas gélidas, algo que se sabía que iba a ocurrir en este trimestre del curso, con la llegada del invierno. Es vergonzoso”, resalta Fernández. Igualmente, insiste en la necesidad de “invertir en educación y garantizar el cumplimiento de los derechos de los niños, niñas y de los y las jóvenes”.
Así, tras informar la edil al resto del Equipo de Gobierno de la reunión mantenida con la Coordinadora y la Flampa, se ha decidido hacer una donación económica por parte del grupo municipal a la Flampa para que adquiera medidores de CO2 y los distribuya posteriormente por los colegios e institutos de titularidad pública. “La responsabilidad es la Junta, pero viendo que no está haciendo nada por el bien del alumnado ni del profesorado, hemos decidido, una vez más, mostrar nuestro apoyo con hechos a la comunidad educativa de la escuela pública, de manera que se pueda comprar al menos un medidor para cada uno de los centros públicos de la ciudad”, expone Fernández.
Otro de los temas que abordaron ayer en la reunión vía telemática fue la campaña de escolarización para el próximo curso y en la que ya comenzó a trabajar la Delegación municipal de Enseñanza antes de las Navidades. Así, de nuevo este año el Ayuntamiento se coordinará con la Coordinadora y la Flampa para promocionar la escolarización en la escuela pública ante el período de matriculaciones. No obstante, será una campaña algo diferente a las anteriores, puesto que no se podrán celebrar jornadas de puertas abiertas en los centros como consecuencia de la Covid-19.