Las convocatorias tendrán carácter anual, premiarán la excelencia y se activarán a partir de principios de 2024, con una reserva presupuestaria para ese año de 20 millones
La Consejería de Universidad, Investigación e Innovación, las universidades públicas andaluzas y los sindicatos con representación mayoritaria en el ámbito de la educación superior -CCOO, UGT y CSIF- han alcanzado un acuerdo que permite desarrollar el nuevo modelo de complementos autonómicos dirigido al Personal Docente e Investigador (PDI). Dichos complementos constituyen un tipo de retribución económica ligada a una serie de méritos acumulados en el desempeño profesional de dicho colectivo. Este respaldo dado por el resto de partes implicadas a la propuesta planteada por la Junta de Andalucía permitirá activar en los primeros meses del próximo año 2024 la primera convocatoria acogida a la nueva normativa que, como principal novedad, establece una periodicidad anual.
Con este pacto se culmina un proceso negociador iniciado en febrero de este año y se cumple el compromiso adquirido por el consejero José Carlos Gómez Villamandos con universidades y representantes sindicales en las reuniones celebradas en los últimos meses en el marco de la Mesa Sectorial del PDI.
El secretario general de Universidades, Ramón Herrera, quien ha presidido la última reunión celebrada, junto al director general de Coordinación Universitaria, Lorenzo Salas, ha destacado que “se trata de un acuerdo histórico que acabará con las bolsas de frustración que se generaban entre aquellos profesores universitarios e investigadores que han quedado fuera de las escasas convocatorias que se han llevado a cabo en los últimos 20 años”. Según ha añadido, “de este nuevo sistema de retribuciones complementarias podrá beneficiarse todo el colectivo de PDI andaluz”, que lo conforman casi 18.400 personas, para añadir que una Comisión de Seguimiento se encargará de velar por su cumplimiento.
La previsión que maneja el Gobierno andaluz es que la tramitación del decreto que recoge las bases reguladoras culmine a finales de 2023, de manera que se pueda aprobar a principios del próximo año, permitiendo con ello la publicación posterior de la convocatoria, cuyas implicaciones tendrán efecto a partir de enero de 2024. Todo el
procedimiento de evaluación de los méritos, así como la resolución de este proceso deberán estar culminado en 2024, por lo que los beneficiarios podrán percibir ya en ese ejercicio sus nuevos complementos. Para dar cobertura a las remuneraciones reconocidas en esa convocatoria, la Consejería de Universidad ha reservado en su presupuesto de 2024 una partida de 20 millones de euros adicionales. “Ese montante nos permitirá dar respuesta al incremento de recursos públicos que supondrá esta medida y evitaremos la situación que generó el anterior gobierno socialista, que aprobó una convocatoria sin asignación asociada, con el correspondiente perjuicio para el sistema universitario público”, ha subrayado Herrera.
Un sistema más simplificado y nuevas figuras reconocidas
El complemento autonómico es una retribución adicional al sueldo de esta plantilla universitaria que está vinculada a la actividad que desarrollan en el campo de la docencia, la I+D y la transferencia, así como en materia de gestión. Con su reconocimiento se persigue alcanzar la excelencia en el desempeño profesional en cada una de esas áreas. Además, dicha remuneración se distribuye en tramos y el número máximo que es posible acreditar son cinco, divididos entre docencia, investigación y gestión.
La Consejería de Universidad incorpora al nuevo sistema de complementos autonómicos una serie de modificaciones que mejoran y simplifican el hasta ahora aplicado. Entre los cambios más relevantes, destaca, además del carácter anual que por primera vez tendrán las convocatorias, la ampliación de figuras que pueden participar, con la incorporación de los profesores sustitutos interinos a tiempo completo, los asociados y los investigadores de excelencia. Éstos se suman a los profesores funcionarios, a los contratados doctores, incluyendo a los interinos y a los ayudantes doctores. Igualmente, con el nuevo sistema no se requerirá antigüedad para presentarse, como así se exigió en 2018, cuando se estableció un límite mínimo de dos años.
La nueva normativa en la que se trabaja también contempla flexibilizar los criterios para alcanzar los cinco tramos reconocidos, de forma que será posible tener en cuenta únicamente los criterios fijados para docencia e investigación y no los contemplados para la gestión. También se amplían los tramos que son posibles acumular por la actividad docente, pasando de los dos actuales a los tres. En este campo de la docencia se incrementa igualmente la valoración dada hasta ahora a los quinquenios -que es el periodo de evaluación-, que se puntuarán con 1,5 puntos en vez de con un punto.
En lo referente a investigación, también se aumentan los tramos, pudiéndose alcanzar hasta tres en vez de los dos actuales; y la puntuación dada a los méritos -que se analizan en periodos de seis años- se incrementa hasta seis frente a los cuatro de ahora. Para aquellas figuras sin acceso a la evaluación de sexenios, la Junta prevé un procedimiento extraordinario a través de la Agencia para la Calidad Científica y Universitaria de Andalucía (ACCUA). Por otro lado, se garantizará a quienes no participen en la nueva convocatoria que su experiencia docente e investigadora se compute cuando accedan a otras figuras.
Sexto tramo
El decreto que regule el nuevo modelo de complementos autonómicos recogerá la creación de un sexto tramo dirigido a premiar la excelencia y la transferencia, aunque en esta primera convocatoria no se aplicará aún. “Sus características se detallarán en una Comisión de Seguimiento para poderlo poner en marcha en los siguiente procesos”, ha matizado el secretario general de Universidades.
En cuanto a la simplificación del procedimiento, la Junta agilizará la gestión hasta convertirla prácticamente en automática, evitando así las complejas solicitudes de otras convocatorias. También el Gobierno autonómico se ha marcado como límite para resolver la convocatoria un periodo de seis meses a contar desde su publicación con el fin de evitar los retrasos que se acumularon en la convocatoria abierta en 2018.
La última evaluación de los méritos se convocó en 2018
La legislación estatal universitaria atribuye a las comunidades autónomas la regulación y concesión de los complementos autonómicos. Desde 2008 hasta 2018 no se realizó ninguna convocatoria y la de ese último año no se llegó a resolver por el gobierno socialista, lo que motivó que se tuviera que completar el proceso y abonarse los importes a partir de 2019, en la primera legislatura del Gobierno de Juanma Moreno.