La edil popular lamenta “llegar a este día con la Unidad Alerta sin un teléfono de atención eficaz, diciéndole a las mujeres como tienen que mirarse y con un taller de delantales; hace décadas que nos hemos quitado los delantales para coger los taladros”
El Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento de Cádiz ha denunciado este viernes la situación de la Fundación Municipal de la Mujer “tras más de cuatro años de gestión de Podemos en la ciudad en los que no se ha avanzado ni un solo milímetro en las políticas de igualdad. Más aún, se ha retrocedido, por mucho que se grite en concentraciones cada vez que llega un ocho de marzo. El 8-M se reivindican políticas de igualdad y el resto del año se practican, menos en Cádiz, que solo están en la anécdota”, en palabras de la concejala Maite González García-Negrotto.
Maite González ha lamentado “llegar a este día con la Unidad Alerta –que fue cambiada de nombre por puro sectarismo- sin un teléfono de atención eficaz”. La edil ha recibido numerosas quejas ciudadanas por la desatención de un servicio que no solo fue pionero en Andalucía y España, sino premiado y reconocido en todos los ámbitos.
González ha denunciado las deficiencias en la atención al teléfono 900212130 que antes contaba con un sistema mediante el que se daba prioridad en la central de Policía Local. Cuando se puso en marcha la Unidad Alerta por el Partido Popular en 2002 en la central de recepción de llamadas de la Policía Local se habilitó un sistema informático llamado “Séneca” que permitía que las llamadas dirigidas al 900212130 fueran reconocidas por el sistema con un color morado de manera que se priorizaba sobre cualquier otra llamada o intervención. A día de hoy ese sistema no funciona, entrando las llamadas al teléfono de la antigua Unidad Alerta en la cola de atención por parte de los agentes sin ser prioritarias.
Un programa vital que se está dejando morir
La concejala popular también advierte de los planes de reestructuración de la Policía Local que, según denuncias de agentes de ese cuerpo, va a poner en peligro la continuidad del servicio ahora llamado Viogen que atendía la Unidad Alerta; “antes al menos mantenían los programas de Igualdad y contra la violencia de género que puso en marcha el PP, aunque no hicieran nada nuevo, ya ni los conservan en las debidas condiciones, y el problema real es que hay actuaciones como esta de la Unidad Alerta que son vitales y se están dejando morir. No es de recibo que una llamada a ese teléfono no se atienda de inmediato desde la central de llamadas de la Policía Local o que vivamos con la incertidumbre sobre la adscripción de agentes a este servicio”.
Delantales reivindicativos, ascensores rotos y cursos demandados
Maite González también ha denunciado que la celebración del 8 de marzo como día para reivindicar la igualdad de las mujeres se haya centrado en el Ayuntamiento de Cádiz “en unas jornadas donde lo más destacado es un taller para decirnos a las mujeres como tenemos que mirarnos el sexo, como si no supiéramos lo que tenemos y dónde lo tenemos, y con un taller de delantales reivindicativos; hace décadas que nos hemos quitado los delantales para coger los taladros, ya esta bien de estereotipos. Yo no quiero ser la que hago las tortillas y el puchero mientras espero que el hombre cuelgue un cuadro o cambie una bombilla. Hay asociaciones en Cádiz que llevan meses demandando en la Fundación talleres de mantenimiento del hogar y bricolaje. Instrumentos que hagan que la independencia de una mujer sea más real. Aprendizaje práctico para que los roles en el hogar y en la sociedad en general, cambien definitivamente, eso es empoderar, pero supongo que no luce muy bien en un folleto de Podemos sobre la Igualdad”.
La concejal popular concluyó reclamando “políticas reales de igualdad y una verdadera atención a las entidades y a las mujeres gaditanas, que han visto como su punto de referencia, que era el Palillero, está cada vez para menos cosas relacionadas con este ámbito. El ascensor lleva semanas sin funcionar sin que nadie se haga cargo, las salas se ceden para cualquier cosa menos para su trabajo diario y nadie les escucha. Eso sí, el 8-M no hay quien grite más fuerte que las concejalas de Podemos en la calle. Además de gritar cuando se gobierna hay que poner en práctica eso que se grita cada 8-M”.