Pedro Sánchez presenta el Plan España Auto 2030 para impulsar un coche eléctrico “español y económico”

El plan incluye ayudas directas a la compra, inversión en puntos de recarga y nuevos fondos para el PERTE VEC, con el objetivo de reforzar la industria automovilística y acelerar la electrificación del transporte.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado en Madrid el Plan España Auto 2030, una estrategia estatal diseñada para acelerar la electrificación del automóvil, apoyar al sector industrial y facilitar que las familias puedan acceder a vehículos eléctricos más económicos. El programa, fruto de la colaboración público-privada, combina incentivos a la demanda, mejoras regulatorias, inversión en infraestructuras y apoyo a la innovación, con el fin de consolidar un “coche eléctrico español y asequible”.

Durante el acto, Sánchez señaló que la electrificación del automóvil “ha llegado para quedarse”, subrayando que el objetivo es fabricar vehículos que sean competitivos y que puedan ser adquiridos por la clase media y trabajadora. El presidente destacó que, pese a que el coste de adquisición sigue siendo elevado, el vehículo eléctrico presenta un ahorro relevante a lo largo de su vida útil en combustible y mantenimiento, además de una reducción notable de emisiones contaminantes.

El plan se articula en tres grandes ejes. El primero se centra en reducir el coste de acceso para los consumidores mediante el nuevo Plan Auto+, dotado con 400 millones de euros en 2026 y gestionado directamente por el Gobierno central. Estas ayudas complementan los programas previos del Plan Moves, que ya han movilizado 1.700 millones de euros y han permitido la compra de más de 170.000 vehículos electrificados. Sánchez avanzó que el próximo año se verá una amplia oferta de modelos por debajo de 25.000 euros, una tendencia que considera clave para generalizar el uso del eléctrico.

El segundo eje se dirige al desarrollo de la infraestructura de recarga. El Ejecutivo pondrá en marcha un nuevo Moves Corredores, dotado con 300 millones de euros, para desplegar puntos en zonas donde aún existe déficit. El presidente explicó que la red pública de recarga de más de 43 kW ha crecido más de un 50% en un año y supera los 40.000 puntos, gracias a una inversión acumulada superior a los 600 millones entre Moves III, Moves Flotas y Moves Singulares. No obstante, Sánchez insistió en que “falta infraestructura y sobra burocracia”, reclamando la implicación de todas las administraciones.

El tercer eje refuerza la innovación y competitividad del sector, con 580 millones adicionales destinados al PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado. El objetivo es que España avance en toda la cadena de valor del vehículo eléctrico, desde el diseño y los componentes hasta la fabricación y reciclaje de baterías. En los últimos años, el PERTE VEC ha movilizado más de 3.000 millones y ha impulsado proyectos industriales como las gigafactorías de Sagunto, Figueruelas y Navalmoral de la Mata.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, afirmó que la actual es “la década de la electrificación” y destacó la necesidad de combatir la desinformación sobre los vehículos eléctricos. Aagesen recordó que la Agenda Verde sigue avanzando y que la transición energética es esencial para mejorar la calidad del aire, reducir emisiones y reforzar la autonomía industrial del país.

El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, calificó el plan como una “gran oportunidad” para consolidar la estrategia industrial española en el ámbito de la movilidad sostenible. Subrayó que la iniciativa aporta “certidumbre y unidad de acción” en un momento clave para una de las transformaciones industriales más relevantes de las últimas décadas.

Con este plan, el Gobierno busca situar a España en una posición de liderazgo europeo en movilidad eléctrica y asegurar que la industria automovilística, responsable de cerca del 10% del PIB y dos millones de empleos, afronte con garantías los cambios tecnológicos y ambientales de los próximos años.