La comparsa de Iván Romero ‘¡Quieto todo el mundo!’ que abrió la jornada fue la única que verdaderamente cumplió las expectativas. Fieles a su estilo entregaron un repertorio brillante con el que es posible que este año lleguen lejos.
Las chirigotas’Los Gipsy Scream’ y ‘Los hijos del carota’ estuviero bien, pero por debajo de lo que se esperaba de ellos. En su línea y con mucho arte actuaron ‘Una peli de comboys’. Sin pretensiones, pero disfrutando y haciendo disfrutar, que en el fondo es de lo que se trata.
Todo lo demás, al cajón. Sin duda el coro de Ayamonte ‘El fantasma del tablao’ será recordada y entrará a formar parte del anticarnaval. LAs comparsas sevillanas ‘Hospital febrero’ y ‘La divina comparsa’, defraudaron.