Abrió la sesión el coro ‘La dinastía‘ de Salvador Longobardo con un tipo impactante de guerrero medieval del Imperio Chino. Un tango musicalmente bonito pero flaquearon en los cuplés, el primero demasiado explícito.
Siguió la comparsa de Cádiz ‘Los don nadie‘ con un repertorio muy endeble aunque consiguieron levantar a parte del público con un pasodoble efectista a las mujeres con cáncer de mama. Por lo demás una comparsa que está muy lejos de luchar por pasar de fase.
La sorpresa de la noche vino de la mano de la chirigota de San José de la Rinconada ‘No te vayas todavía‘ que prácticamente tienen asegurado cantar en cuartos de final. Una chirigota golfa e irreverente, políticamente incorrecta. Consiguieron levantar el teatro al grito de «¡Chirigota, chirigota!».
Otra agrupación que ha sabido dar un salto de calidad con respecto al año anterior ha sido la comparsa sevillana ‘No me toques las bolas‘. Con un repertorio que hace referencia al tipo en cada verso han conseguido llegar al corazón del público y lucharán por volver a cantar en la siguiente fase.
La penúltima agrupación de la noche fue el cuarteto gaditano ‘Anónimo‘ que acusó en demasía el salto a la categoría adulta. Con un repertorio muy endeble consiguieron sacar adelante la actuación a duras penas, gracias también a que el público fue más respetuoso que nunca.
Cerró la noche una de las agrupaciones más esperadas de este año, la comparsa de Antonio Martín ‘Ley de vida‘ que para esta ocasión ha conseguido reunir algunos de los componentes de aquel mítico grupo de los 80 y 90. Un acierto como Antonio Martín ha sabido sacar partido a estos viejos copleros para emplearlos en la idea de la comparsa buscando el enfrentamiento entre generaciones. Eso unido a la música y las letras que presentan les puede convertir en el rival a batir este año. Está claro que el veterano autor ha sabido aprovechar la expectación creada en los últimos meses en beneficio de su comparsa.