La portavoz de IU alerta sobre las obras que van a convertir una bodega centenaria en la calle Banda Playa en viviendas
A este equipo de Gobierno desnortado poco o nada le interesa Sanlúcar ya que anda más preocupado por fomentar un modelo económico caduco que ya nos condujo a una crisis terrible. Ahora la víctima del amor por el urbanismo desaforado del Gobierno municipal de PSOE y Ciudadanos es el rico patrimonio histórico de la ciudad, precisamente una de las patas que Izquierda Unida Sanlúcar considera como vital para llevar a la ciudad a un nuevo escenario de crecimiento más sensible con las necesidades de todos nuestros vecinos y vecinas. Así lo hicimos constar en el documento Turismo y Nuevo Modelo Productivo que ofrecimos al resto de formaciones políticas durante el pasado Estado de alarma y que detallaba más de un centenar de propuestas para construir la Sanlúcar del futuro.
El caso es que el equipo de Gobierno y la Gerencia de Urbanismo han dado sus bendiciones para construir viviendas en una finca situada en la confluencia de las calles Cruces y Banda Playa, en el lugar que ocupa una bodega centenaria (construida en 1924) declarada Bien de Interés Cultural en 1973. La concejala y portavoz municipal de IU Sanlúcar, Carmen Álvarez Marín declara que “al equipo de Gobierno le da igual que se trate de una maravillosa muestra de la arquitectura bodeguera, tan nuestra, que sea un edificio protegido o que se vaya a destruir parte de nuestro patrimonio histórico-artístico en pleno centro de la ciudad”. Para la edil lo que en realidad interesa a Víctor Mora y sus aliados “es el puro interés económico, el hacer caja aunque sea a costa de la herencia de todos los sanluqueños y sanluqueñas, beneficiando a un sector privado que se va a lucrar con unas viviendas que no tendrán nada de sociales, en una ciudad donde hace años no se construye una vivienda para gente que en realidad lo necesita. Y todo ello con el beneplácito de la Gerencia de Urbanismo que permite la destrucción del patrimonio histórico de todos. Una razón más para pedir la disolución de este organismo innecesario”.
IU Sanlúcar se suma de este modo a la denuncia realizada recientemente por Aula Gerión en defensa de este edificio singular. Pero el tiempo corre en contra de los que defendemos el patrimonio de nuestra ciudad. Ya se ha destejado la cubierta de la bodega, donde la constructora va a edificar 12 viviendas con dos áticos, trasteros y piscina, además de once plazas de aparcamiento, lo que significa la completa destrucción del espacio bodeguero, como edificio singular con características propias entre las que destaca su espacio interior diáfano. Aunque se conserve la fachada, la bodega será devastada.
“Este equipo de Gobierno no hace nada por proteger nuestro patrimonio histórico. Todo lo contrario, pone las bases para que se pierda. Por eso pedimos a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía que revise el expediente de esta actuación que puede convertirse en un atentado contra la arquitectura bodeguera sanluqueña”, concluye Carmen Álvarez quien propone que este tipo de construcciones deben preservarse y si ya no cuentan con actividad industrial “se constituyan en elementos para la difusión de la historia vitivinícola sanluqueña”.