Como parte del ‘congreso’, fueron “ensogados” 10 toros y 2 vaquillas
La Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) ha interpuesto un recurso de alzada, ante el Consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía impugnando formalmente la autorización que la Delegación del Gobierno de la Junta en Cádiz concedió al Ayuntamiento de Grazalema, el pasado 29 de mayo, para que fueran atados por las astas 10 toros y 2 vaquillas, para ser sacados por las calles de Grazalema los días 2, 3 y 4 de junio de 2023, como parte de un congreso de Toros con Cuerda ocurrido en Grazalema (Cádiz) del 1 al 4 de junio.
Cabe recordar que el pasado 22 de mayo, una semana antes de que la Delegación del Gobierno de Cádiz autorizara estos 12 astados ensogados, ANPBA había presentado una solicitud formal, ante la Delegada del Gobierno para que «no se autorizara el uso de reses de lidia atadas con maromas o sogas».
Y es que los «toros de cuerda», que están prohibidos con carácter general en Andalucía por el sufrimiento que supone para los animales, únicamente están autorizados en once municipios andaluces, pero no sin requisitos porque deben demostrar que poseen una «tradición acreditada» que justifique su celebración.
Ahora, como se expone en el recurso presentado ante el Consejero de Presidencia, ANPBA impugna la autorización porque el único festejo con «toro de cuerda» autorizable en Grazalema, al poseer una «tradición acreditada», es el festejo que se realiza el lunes siguiente a la festividad de la Virgen del Carmen, el 16 de julio, motivo por el que, esta “costumbre” no podría aplicarse, por extensión, al uso de reses ensogadas que tuvo lugar a principios del mes de junio, por lo que, presuntamente, no podrían acogerse a la tradición propia y exclusiva de Grazalema, «no ampliable a otros municipios», como determina la Disposición Adicional Primera del Reglamento taurino andaluz, y, por tanto, «tampoco subsumible con otras “tradiciones” en una suerte de revoltijo, de totum revolutum».
De hecho, ANPBA ha invocado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) en relación con otro “toro de cuerda” realizado en Astudillo (Palencia) y que quedó prohibido tras el recurso interpuesto por ANPBA, determinando dicha sentencia que la tradición de un espectáculo taurino con toros ensogados no puede extenderse a otros espectáculos «que se le puedan parecer o que sean similares».
Finalmente, ANPBA ha puntualizado que, como asociación «absolutamente contraria a la utilización de animales en espectáculos de diversión», utiliza todo medio legal a su disposición, en este caso el presente recurso de alzada, para luchar, «con la ley en la mano», contra cualquier festejo que suponga sufrimiento, dolor, estrés o angustia para los animales.